El golf se estrenó en los Juegos Panamericanos Toronto 2015

El golf realizó el jueves su debut en los Juegos Panamericanos en preparación a su regreso a la familia olímpica el próximo año en Río de Janeiro tras una ausencia de 112 años.

El torneo de cuatro días tiene una mezcla modesta de profesionales y amateurs: 64 jugadores -32 hombres y 32 mujeres. Pero saber que este evento conduce al golf olímpico lo convierte en algo grande, muy grande.

"Va a ser tremendo", dijo Felipe Aguilar, quien totalizó 69 golpes, tres bajo par, en la primera ronda y espera representar a Chile en los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro en 2016.

Aguilar comentó que ni siquiera sabía que el golf sería parte de los Juegos Panamericanos, hasta que fue invitado a jugar hace unos meses durante una entrevista de radio.

"Espero que éste sea el momento para que explosione el golf en Sudamérica", agregó Aguilar, quien jugó la semana pasada en Escocia en la Gira Europea y viajará el domingo para un evento en Suiza. "Es (un deporte) muy privado en Latinoamérica. Quizá esto impulse al juego para que sea más popular y más abierto".

Adilson da Silva, un profesional que juega principalmente en Asia y Sudáfrica, dijo que "sería el punto relevante de mi carrera representar a Brasil, en Brasil".

"Espero que las Olimpiadas tengan un gran impacto en el juego, para que mucha gente ver de qué trata", añadió.

Julieta Granada, la jugadora con mejor posición en la lista de la Gira U.S. LPGA en el evento, ocupando el 35to sitio, dijo que el golf era invisible en su natal Paraguay.

"Creo que hay seis o siete campos en todo el país", comentó Granada, quien firmó el jueves tarjeta de 68 golpes para encabezar el torneo panamericano femenil en el Angus Glen Golf Club, ubicado al noreste del centro de Toronto.

El golf casi no tiene presencia en Brasil, siendo un juego para ricos que carece del atractivo masivo del fútbol y el voleibol.

El campo nuevo de golf para los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro, el cual es anunciado como un "campo público", está rodeado de lujosos apartamentos que tendrán un costo mínimo de dos millones de dólares. Eduardo Paes, alcalde de Río de Janeiro, ha dicho reiteradamente que nunca hubiera impulsado la construcción de un campo de golf, si no fuera por los Juegos Olímpicos.