Una Ledecky imparable consigue su tercer oro en Kazán

Con esta nueva medalla de oro, Katie Ledecky se convierte en la primera mujer en la historia de la natación que gana las pruebas de 200, 400 y 1500 en un mismo Mundial.

Un día más la protagonista del Mundial de natación de Kazán fue la estadounidense Katie Ledecky. La joven nadadora de 18 años no acusó el cansancio del día anterior donde batió el récord del mundo de 1.500 y se impuso en la final de los 200 libres aunque en esta ocasión no pudo rebajar el tope mundial de la distancia, unos 1.52.98 que a día de hoy es impensable conseguir y que marcó la italiana Federica Pelegrini en 2009 con bañador de plástico. Ledecky se impuso nadando de menos a más con un rono final de 1.55.16 acabando segunda precisamente Pelegrini, que se colgó la medalla de plata con 1.55.32. Copó el podio otra estadounidense, Missy Franklin, que ha llegado al Mundial de Kazán un poco por debajo de sus marcas y que acabó los 200 libres con un crono de 1.55.49.

Con esta nueva medalla de oro, Katie Ledecky se convierte en la primera mujer en la historia de la natación que gana las pruebas de 200, 400 y 1500 en un mismo Mundial. La estadounidense tiene todavía por delante el 800 libre y el 4x200 donde parte con serias obciones de llevarse las medallas de oro y completar el repóker.

Muchas carreras importantes estaban en el programa de ayer. Al margen de los 200 libres femeninos también había gran expectación en los 50 braza, donde en series y semifinales batieron el récord del mundo el sudafricano Cameron Van der Burgh y el británico Adam Peaty respectivamente. La final no se nadó sin embargo a ritmo de récord, pero estuvo presidida por una gran emoción por la increíble igualdad entre estos dos nadadores. El británico se llevó el gato al agua y ganó el oro con 26,51, una décima por encima de su récord en semifinales (26,42); el sudafricano se colgó al cuello la medalla de plata con 26.66 mientras que el estadounidense Kevin Cordes fue bronce (26.86).

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