La saltadora ucraniana Mahuchikh acapara todos los focos en Karlsruhe

La jovencísma ucraniana Yaroslava Mahuchikh, de tan sólo 18 años, acaparó todos los focos en la reunión de Karlsruhe, tras imponerse este viernes en la final de salto de altura con una marca de 2,02 metros, mejor registro mundial del año y nuevo récord del mundo sub 20.

Mahuchikh, que ya dio el pasado año muestras del inmenso talento que atesora tras proclamarse subcampeona del mundo al aire libre en Doha, dejó claro en la ciudad alemana que este año quiere dar un paso más y alzarse con el oro en los Juegos Olímpicos de Tokio.

Hasta el momento nadie ha sido capaz de derrotar este año a la ucraniana, que en apenas dos semanas se ha impuesto en las reuniones de Lvov (Ucrania), Cottbus (Alemania) y este viernes en Karlsruhe.

Y eso que no se lo puso fácil su compatriota Yuliya Levchenko, cuarta en los pasados Mundiales de Doha, que lideraba la prueba tras saltar a la primera las cinco primeras alturas.

Todo lo contrario que Mahuchikh, que superó a la segunda tanto el 1,93 como el 1,96, pero llegado el momento de la verdad la joven ucraniana no falló y se alzó con el triunfo tras saltar en su primera tentativa tanto el 1,99 como el definitivo 2,02.

Una marca que permitió al Yaroslava Mahuchikh ratificarse al frente de la clasificación mundial el año, que ella misma ya lideraba gracias a los 1,99 que saltó el pasado miércoles en Cottbus.

Pero ni aún así se conformó la joven saltadora ucraniana que colocó el listón en 2,04 metros, una marca que no pudo superar en esta ocasión, aunque como ella misma comentó, sí espera poder hacerlo en sus dos próximos compromisos en Eslovaquia y Glasgow.

Si Mahuchikh reinó en la altura, en la pértiga el triunfador fue el veterano francés Renaud Lavillenie, que se impuso con un mejor intento de 5,70 metros, en una prueba en la que decepcionó el vigente campeón mundial, el estadounidense Sam Kendricks que no pudo pasar de los 5,50 metros.

Tampoco pudo confirmar su condición de favorita la alemana Malaika Mihambo, oro en salto de longitud en Doha, que tuvo que con conformarse con un salto de 6,83 con la segunda plaza, superada por la ucraniana Maryna Bekh-Romanchuk, que en su único saltó válido se escapó hasta los 6,92 metros, mejor marca mundial del año.