Puig, eliminada en primera ronda del US Open
Fuera del Abierto de Estados Unidos tras el primer pulso, Mónica Puig no quiso sumirse en el desencanto. La puertorriqueña de 19 años se despidió del último Grand Slam de la temporada al sucumbir 6-4, 3-6, 7-5 ante la rusa Alisa Kleybanova. "He tenido un año fabuloso. No solo me voy a enfocar en esto, en lo que pasó hoy. Lo que pasó hoy, va a pasar muchas veces en mi carrera, tengo que mirar esto con mente positiva", dijo Puig. En su primera temporada peleando en las grandes citas del tenis, la boricua impresionó gratamente con una tercera ronda en el Abierto de Francia y luego - una instancia más lejos- en los octavos de final en Wimbledon. Mantenerse en esa línea ascendente en los Grand Slams alimentaba las expectativas de Puig, quien comenzó la semana situada como número 44 del mundo. "Luché hasta al final, no le di el partido gratis. Ella lo tuvo que luchar", dijo Puig. "Nada, hay que seguir trabajando, ahora me tocan cuatro torneos en Asía. El ránking vendrá, pero lo importante es el trabajo en la cancha". Su partido ante Kleybanova, una ex Top 20 del mundo que tuvo que interrumpir su carrera en 2011 tras serle diagnosticado el linfoma de Hodgkin, fue reñido. Pero también marcado por el desempeño irregular de ambas con el saque. Mientras que Kleybanova aprovechó siete de las 10 bolas de quiebre que dispuso, Puig capitalizó seis de 13. Puig tuvo que remar contracorriente en el decisivo tercer set, y logró nivelarlo 5-5 tras verse abajo, pero la rusa supo cerrarlo. "Hay días buenos y hay días malos. Hoy fue uno que cae entre los dos", dijo Puig. También expresó su admiración hacia Kleybanova en su lucha por volver a competir. "Ella fue una Top 20 por algo. Es increíble lo que ha hecho, poder volver tras eso y poder jugar con tan excelente nivel. Definitivamente, no me sorprendería que ella se meta otra vez entre las mejores", declaró Puig. La rusa de 24 años tuvo que abandonar el circuito profesional para seguir un tratamiento contra un tipo de cáncer sanguíneo, y se sometió a quimioterapia hasta diciembre de 2011. Kleybanova empezó la semana como la número 363 del mundo y logró entrar a la llave del US Open al hacer uso de su ránking protegido. Es su primer Grand Slam desde el Abierto de Australia en enero de 2011. Sin minimizar el hecho de ser un modelo de perseverencia, Kleybanova señaló que su enfoque está en disputar la mayor cantidad de partidos para recuperar su nivel. "Entiendo que eso es así (el ser un ejemplo), pero de veras que no me fijo tanto en eso. Debería, pero no sé. Estoy contenta que todo esto ya pasó, por lo que tuve que pasar. Salí triufante de esa batalla", afirmó la rusa sobre su tratamiento. "Ahora mismo estoy de vuelta en las canchas y estoy completamente concentrada en mis partidos". Kleybanova alcanzó el número 20 en el escalafón, su puesto más alto, y en dos ocasiones accedió a la ronda de octavos en individuales en Grand Slams. "Quiero ganar, tenía tanto de volver. El tenis es lo único que tengo en la mente", indicó la rusa. "Sólo quiero ser una jugadora de tenis".