Volkswagen apuesta por descentralizar la empresa, tras el escándalo
El presidente de la junta directiva de Volkswagen, Matthias Müller, anunció hoy un plan de cinco puntos para afrontar el escándalo de las manipulaciones de las emisiones contaminantes de los motores diésel, que incluye descentralizar el grupo y dotar de más independencia a marcas y regiones.
En un comunicado tras la presentación de los resultados del tercer trimestre, en el que la compañía sufrió una pérdida de 1.673 millones de euros, Müller apostó por "mirar más allá de la actual situación y crear las condiciones para que el desarrollo futuro de Volkswagen sea exitoso".
Müller forma parte de la delegación empresarial que acompañará hoy a la canciller alemana en un viaje a China y tendrá ocasión de explicar a Angela Merkel los pormenores del escándalo.
Según subrayó, la prioridad de su plan de cinco puntos son los clientes afectados por las manipulaciones.
La empresa está trabajando "intensamente" para desarrollar las soluciones técnicas necesarias para reparar los vehículos, que comenzarán a aplicarse el próximo enero.
Su segunda prioridad, añadió, es concluir la "sistemática" investigación puesta en marcha para aclarar lo sucedido, para lo que se ha contratado a la auditora Deloitte.
"Debemos desvelar la verdad y aprender de ello", añadió, para garantizar que "los responsables de lo sucedido tendrán que asumir duras consecuencias".
En el tercer punto de su plan destacó su apuesta por introducir nuevas estructuras en el grupo para "descentralizarlo en gran medida en el futuro", con más autonomía para las distintas marcas y regiones y con la junta directiva del grupo centrada en las estrategias globales, para fomentar sinergias y asegurar la eficiencia de los recursos.
"Revisaremos con detalle la actual cartera de más de 300 modelos y examinaremos la contribución de cada uno a nuestras ganancias", explicó.
El plan incluye también para introducir cambios en la cultura de la empresa para dotarla de más apertura y mejorar el modo el que Volkswagen comunica y gestiona sus errores.
Los actuales planes de la empresa, la denominada "Estrategia 2018", se transformarán y el año que viene se presentará una estrategia hasta 2025.
Müller, que se mostró convencido de que Volkswagen "saldrá de la situación actual más fuerte que antes", aseguró que el objetivo no es vender 100.000 coches más o menos que el principal competidor, sino garantizar el crecimiento "cualitativo" de la compañía.