La historia de la mujer que se hizo pasar por 'médico' y fue juzgada por seducir a sus pacientes

Agnódice se enfrentaba a la pena de muerte por haber abusado sexualmente de sus pacientes / Google

Agnódice estaba en el banquillo de los acusados. Un grupo de médicos había presentado cargos en su contra argumentando que seducía a las mujeres que eran sus pacientes, y peor, que hasta había violado a dos. El veredicto del Consejo era unánime e irrefutable: "culpable".

Viéndose entre la espada y la pared, pues se enfrentaba a una sentencia de muerte, Agnódice se levantó la túnica y sin necesidad de palabras les dejó saber al Consejo que era mujer, no hombre, como había hecho creer.

"¡Una mujer, practicando medicina!", exclamaron algunos, como escupiendo las palabras.

Pero por qué una mujer había llegado al punto de hacerse pasar por hombre para practicar una profesión tan noble como la medicina.

Corría el siglo IV a.C. en la magnífica civilización griega y la medicina estaba prohibida para las mujeres.

Los atenienses poderosos no veían con buenos ojos que las matronas acumularan tan impresionante gama de conocimientos y talentos en un campo relacionado con la reproducción de sus herederos.

Así que decidieron prohibir que las mujeres practicaran la partería y la medicina, so pena de muerte.

Fue un golpe terrible, no solo para las comadronas que se quedaron sin medios de subsistencia, sino también para las mujeres cuyos partos, sin la guía de una partera, a menudo terminaban en desastre.

Aunque es importante aclarar que Hipócrates, el padre de la medicina moderna, no admitía mujeres en su escuela primaria de medicina en su isla natal de Cos, al parecer sí les permitía estudiar temas obstétricos y ginecológicos en sus otras instalaciones de enseñanza.

La práctica de la medicina era reservada exclusivamente para los hombres / Google

Siempre quiso ser doctora

Agnódice había querido estudiar medicina y practicar partería desde pequeña. Cuando le cerraron las puertas por ser mujer, se cortó el cabello, se puso ropa de hombre y se fue de Atenas a Alejandría a estudiar con Herófilo de Calcedonia, el primer anatomista y cofundador de la legendaria escuela de medicina en Alexandria.

Tras su regreso a Atenas, ya graduada, Agnódice trató de atender un parto particularmente difícil.

La mujer se negaba a dejarse ver por los médicos, a pesar de su agonía. Desesperada por ayudar, Agnódice levantó su túnica para revelar sus pechos; al verlos, la paciente, aliviada, le permitió ayudarla.

El secreto de Agnódice se difundió rápidamente entre las mujeres y su práctica creció tanto que los otros médicos se molestaron.

Por eso empezaron a hacer correr el rumor de que seducía y corrompía a las esposas de otros hombres, y levantaron falsos testimonios para acusarla de violación sexual con penetración a dos pacientes.

La pasión por la medicina de Agnódice la llevó a hacerse pasar por hombre a pesar de que pudo costarle la vida / WELLCOME COLLECTION

El juicio

Era indudable que Agnódice había violado la ley, y quienes estaban presentes en el juicio sabían cuál era el castigo.

Pero un gran obstáculo lo impidió: una multitud furiosa de mujeres atenienses acaudaladas, a quienes Agnódice había ayudado, entre ellas esposas de médicos y políticos que la habían acusado, exigieron su liberación.

Sin ella, afirmaron, muchas de ellas estarían muertas o morirían en el futuro.

Si ejecutaban a Agnódice, declararon, "todas moriremos con ella".

La rebelión resultó no solo en la liberación de Agnódice sino también en la anulación de la ley que prohibía a las mujeres practicar la medicina, siempre y cuando solo trataran a pacientes del mismo género.

Antes de irnos, es importante señalar que esta es una de las varias historias que siempre ha sido, y probablemente siempre será, un misterio histórico.

Algunos eruditos creen firmemente que es un hecho histórico, mientras que otros creen que pertenece al reino de los mitos y las leyendas.

***Nota publicada en www.bbcmundo.com***

Si te lo perdiste
Lo último