Investigación científica: los cambios culturales y su impacto en la sexualidad de hombres y mujeres

Los cambios culturales, el desarrollo de la ciencia y la evolución de las sociedades nos han permitido entender que la orientación sexual, la atracción, el deseo y el placer no son conceptos 'cuadrados' de la heterosexualidad. Es un hecho comprobado a través de la evidencia científica que el comportamiento de la sexualidad también ha evolucionado.

Cada vez más y en concordancia con la visibilidad de movimientos feministas, diversos, inclusivos, LGBTIQ, entre otros, las personas están más abiertas a discutir temas como la sexualidad y las identidades menos convencionales, incluso se han convertido en parte de un discurso cada vez más dominante.

Los datos más recientes de una investigación de la Universidad de Nueva York muestran que este cambio es más frecuente en un grupo: las mujeres están ahora adoptando la fluidez sexual a tasas mucho más altas que en el pasado, y de manera más significativa, que los hombres en general.

¿Por qué más mujeres y menos hombres?

Los cambios sociales, que han permitido romper con roles y determinantes convencionales de género, han aportado significativamente.

Un estudio realizado entre 2011 y 2019, según investigadores de la Universidad de Nueva York, demostró que las mujeres universitarias se habían alejado cada vez más de la heterosexualidad exclusiva, al punto de que el 65 por ciento de las consultadas manifestaron sentirse atraídas exclusivamente por hombres, algo que en el 2011 casi que llegaba al 80 por ciento.

También disminuyó la proporción de mujeres que manifestaban tener sexo exclusivamente con hombres, mientras que la atracción y el comportamiento sexual de ellos permanecieron estáticos en el mismo periodo. De hecho, el 85 por ciento manifestó sentirse atraído únicamente por mujeres y el 90 por ciento aseguró que tenía relaciones sexuales exclusivamente con mujeres.

"Ni la heterosexualidad ni la homosexualidad son compartimentos estancos. La orientación del deseo se expresa en términos de mayor o menor preferencia, y no de exclusividad".

El feminismo y los cambios culturales

Las cosas muestran tendencias similares en otros países y, según expertos, no es atribuible solo a un factor, pues elementos como los cambios culturales, el progreso del feminismo, así como las modificaciones en los panoramas sociopolíticos de las últimas décadas se han relacionado con estos procesos.

En la medida en que las mujeres han podido encontrar más libertad, lo mismo que cierta “aceptación” social a la atracción del mismo sexo, puede empujar esta tendencia.

Sean Massey profesor asociado de estudios sobre la mujer, el género y la sexualidad en la Universidad de Binghamton en Nueva York, no descarta que el efecto del movimiento LGBTQ + haya influido en las personas que se identifican como sexualmente fluidas hoy. Además de que el feminismo y el movimiento de mujeres juegan un papel fundamental en el hecho que sean más mujeres las que se identifican de esta manera, que los hombres.

Y lo cree especialmente porque ningún movimiento masculino equivalente ha permitido que los hombres salgan de la misma manera de las restricciones históricas basadas en el género.

"Los hombres necesitan defender un rol de género muy masculino para mantener ese poder, y parte de la masculinidad es la heterosexualidad", dice Elizabeth Morgan, profesora asociada de Psicología en el Springfield College de Massachusetts, EE.UU.

"Hace cincuenta años, no podías tener una vida si no te casabas con un hombre y sólo podías establecerte si él te mantenía", agrega Morgan.

El sexólogo Santiago Frago del Instituto Amaltea de España señala que, más allá de las diferencias entre hombres y mujeres la realidad es que todos nos hemos vuelto un poco más flexibles en cuanto a la sexualidad.

"Lo notamos día a día en los centros educativos, en la consulta, en los foros de debate abierto, en las conclusiones de los congresos de sexología y en el interés por parte del colectivo universitario por apostar por los másteres oficiales en sexología y educación sexual…".

Es más, dice Frago, pese a la escasez de educación sexual en las aulas, cada vez surgen más informaciones, libros, programas y películas sobre sexualidad, formas de comunicar que ayudan a entender conceptos que antes ni si quiera podían debatirse.

A este respecto, el sexólogo expone que la idea que falta por inculcar es que "ni la heterosexualidad ni la homosexualidad son compartimentos estancos. La orientación del deseo se expresa en términos de mayor o menor preferencia, y no de exclusividad".

**Con información de www.bbcmundo.com***