Investigan banda acusada de fraude en millonaria compra bancaria en Brasil
La Policía brasileña realizó hoy una operación contra una banda criminal a la que acusó de fraude en la adquisición que convirtió a la estatal Caixa Económica Federal en importante accionista del Panamericano, un banco mediano investigado por irregularidades y que enfrentó serios problemas de liquidez.
La venta de las acciones del Panamericano al segundo mayor banco estatal de Brasil pudo haber "causado expresivas pérdidas a las arcas públicas", así como a sus clientes y accionistas, informó en un comunicado la Policía Federal, responsable por la operación.
Carca de 200 agentes de la Policía Federal cumplieron este miércoles 46 órdenes de registro y allanamiento en las ciudades de Sao Paulo, Río de Janeiro, Brasilia, Belo Horizonte, Recife y Londrina en residencias y oficinas de los acusados del fraude.
La entidad informó que investiga la posible responsabilidad de los gestores de la Caixa Económica Federal en las cuestionadas operaciones financieras.
El juzgado décimo federal de Brasilia, que expidió los mandatos de allanamiento, también ordenó el embargo de 1.500 millones de reales (unos 483,9 millones de dólares) en las cuentas bancarias de los acusados ante la necesidad de que tengan que ser usados para compensar las pérdidas.
De acuerdo con los responsables por las investigaciones, fueron identificados diferentes núcleos en la organización criminal, entre ellos un "núcleo de agentes públicos que fueron responsables directos por la firma de los informes, contratos y demás documentos que culminaron con la venta de acciones del banco Panamericano tanto a la Caixa como al Banco BTG Pactual".
Otro núcleo era integrado por consultores que emitían informes destinados a legitimar los desvíos y otro por empresarios que, pese a conocer la situación delicada del banco, "contribuyeron en los crímenes investigados", según el comunicado de la Policía Federal.
La entidad dijo que podrá acusar a los miembros de la organización de los crímenes de gestión temeraria y fraude, delitos por los que pueden ser condenados a penas sumadas de hasta doce años de prisión.
Las operaciones financieras investigadas comenzaron en 2009 cuando el Banco Panamericano recibió un crédito por 2.500 millones de reales (unos 806,5 millones de dólares) de un fondo de garantías del Gobierno para sanear las cuentas de una institución en la que el Banco Central había identificado serios problemas de liquidez.
Ese mismo año y para fortalecer la entidad, la Caixa Económica Federal pagó 739,2 millones de reales (unos 238,4 millones de dólares) por el 35 % de las acciones del Panamericano, incluyendo el 49 % de los papeles con derecho a voto.
En 2011 el Banco BTG Pactual pagó 450 millones de reales (unos 145,2 millones de dólares) por el 34,64 % de las acciones del Panamericano, incluyendo el 51 % de acciones con derecho a voto, lo que le garantizó el control, mientras que la Caixa se quedó con el 36,56 % del capital y el 49 % del capital votante.
El Panamericano es una entidad de porte intermedio que se dedica a la financiación de vehículos, principalmente usados, y a los créditos directos al consumidor de clases populares mediante un portafolio que incluye préstamos personales, tarjetas de crédito y seguros.