Cuestionan liberación por $35 millones en cuentas de Cobranzas del Istmo
La decisión del juez primero penal, Rolando Quesada Vallespi, de liberar millonarias cuentas de Cristóbal Salerno, relacionado con el caso de corrupción de Cobranzas del Istmo, ha dejado un sin sabor a varios miembros del sector jurídico panameño.
El excontralor y abogado Alvin Weeden, cuestionó duramente la medida adoptada por Quesada Vallespi de liberar cuentas por 35 millones de dólares y la consideró como una burla más a la justicia en Panamá.
Weeden dijo que se encuentra escandalizado por tal acción, que representa una ridiculez o no es más que un acto de corrupción, por lo que cree que el juez Quesada Vallespi debe ser destituido de su cargo.
“No sé hasta cuándo vamos a seguir soportando jueces que desvirtúan la justicia, jueces que están en sus cargos para encubrir delitos y no para actuar en el marco de las leyes”, expresó Weeden.
Resaltó que no hay esperanza de que se haga justicia en Panamá en los casos de corrupción de alto perfil que se investigan.
Cobranzas del Istmo recibió 47.1 millones de dólares en comisiones por el cobro de 172.9 millones de dólares en cuentas morosas.
El negocio le salió redondo a la empresa durante la pasada administración gubernamental de Ricardo Martinelli.
Llegó incluso a cobrar 21 millones de dólares por recaudarle los impuestos a Tocumen, S.A.
Para Juan Carlos Araúz, vicepresidente del Colegio Nacional de Abogados (CNA) es importante saber cuáles fueron los motivos de la sentencia, pero asegura que debe ser el Tribunal Superior el que decida si fue correcta o no la decisión del juez.
Araúz dijo vía telefónica a TVN-2.com que las partes involucradas deben reaccionar y actuar de conformidad con las leyes a través del recurso de apelación.
Según el vicepresidente del CNA, los jueces deben decidir sin temores ni dejarse llevar por las presiones.
Lo que busca la sociedad es que ni favorezcan la presión ciudadana, pero tampoco cometan arbitrariedades.
