García de Paredes se empecina: ‘Mi gestión agradó a la gente’

Por primera vez en lo que va de este siglo, la Universidad de Panamá (UP) quedará a cargo de alguien distinto a Gustavo García de Paredes. O por lo menos alguien que no lo apoye.

García de Paredes, al ocaso de su gestión, ha defendido este miércoles en TVN Noticias sus 20 años de trabajo y cinco períodos consecutivos como rector. Según dice, elevó el perfil de la universidad.

“La UP ha mejorado mucho, sobre todo en la infraestructura y los equipamientos. Recibí una universidad con un patrimonio de $72 millones y la estoy dejando en $280 millones”, dijo.

El rector saliente, que insiste que no corrió a la reelección por decisión propia y no por presiones opositoras, sostiene que con él, la universidad “avanzó a nivel internacionalmente, aunque mucho más afuera que adentro”.

Puso de ejemplo que fue dos veces presidente de la Unión de Universidades de América Latina. Aunque el año pasado, la UP cayó siete puestos en el ranking de mejores universidades del continente.

“Mi gestión agradó y sirvió a la gente”, agregó. Sin embargo, reconoció que le han presentado 19 denuncias “sin fundamentos”.

Entre sus logros García de Paredes se apunta haber “expandido” la universidad a 40 regiones recónditas del país, donde, dice “había gente marginada, sin esperanzas” de estudiar.

Relativismos

Asimismo, ha ponderado el sentido que le dan sus opositores a la democracia universitaria. “La gente entendió la democracia de forma especial. Es la oportunidad que tiene uno de servir y recibir el apoyo de quienes uno está sirviendo. Las elecciones en la universidad son democráticas”.

Los sectores más críticos de la administración de García de Paredes han cuestionado que se haya convertido en el “todopoderoso” en la UP. Cuando no podía relegirse, consiguió que la junta de la universidad cambiara la ley, y que el Gobierno Nacional lo consintiera.

“Pero yo no he entregado la Universidad a ninguna fuerza política”, asegura.

García de Paredes ha reclamado, sin embargo, que el Gobierno de Juan Carlos Varela le ha “dado la espalda” (“este es el peor de los períodos en los 52 años que he estado en la UP”).

También, se ha plantado contra el contralor Federico Humbert, que no refrendó contratos por $15 millones y ha trabado la sanción de bonos millonarios para profesores como él (dará clases en Humanidades hasta diciembre).

“Me voy con mi salario y mi bonificación, que dice el contralor que no le va a firmar a nadie”, dijo en una entrevista con Castalia Pascual. Poco después, en otra con la versión digital de TVN Noticias, le rebajó el perfil a esa aseveración: “me voy con el bono si el contralor lo aprueba”.

García de Paredes se ha despedido como el mesías académico: “poco son los empleados públicos que pueden dar su historia de esta manera”.