Indígenas ebrios vandalizan patrulla de la Policía

Cerca de 200 indígenas Ngäbe Bugle que estaban en estado de ebriedad y enardecidos vandalizaron una patrulla de la subestación de Policía de Volcán, e intentaron introducirse y volver a quemar el cuartel de policía de este corregimiento, en Tierras Altas de Chiriquí.

Los nativos reaccionaron con esta furia colectiva no usual, luego que dos agentes del orden público les solicitaron abandonar las cantinas en donde estaban libando licor, pasadas las tres y media de la madrugada de este domingo.

Los indígenas intentaron agarrar a las dos unidades de la Policía Nacional que llegaron al área, que debieron huir y buscar refugio dentro de uno de los establecimientos cercanos, para evitar que fueran linchados o que se registrara un hecho de mayor tragedia.

Los dos agentes debieron esperar por más de treinta minutos, prácticamente secuestrados dentro del local y no han podido evitar que la turba de indígenas totalmente en estado de ebriedad, destrozaran todos los vidrios del patrulla, el tablero y las luces del vehículo, dijo el comisionado Julio Lasso, de la Zona Policial de Chiriquí.

Lasso recordó que es “el tercer vehículo que los señores indígenas vandalizan y destruyen en Tierras Altas”, lo que provoca, además de los daños a la propiedad pública, la falta de esta herramienta contra la delincuencia a la comunidad.

Noel Hernández Villarreal, representante de corregimiento de Volcán, lamentó el incidente, que dijo se debe a la gran cantidad de cantinas, bares y bodegas que se dedican a la venta de bebidas alcohólicas en Volcán.

Hay que hacer una regulación más estricta para con estos locales, aplicar las leyes municipales y nacionales a fin de no permitir se sigan produciendo estos actos, propios de la venta indiscriminada de licor, afirmó.

Para las autoridades de la Policía Nacional hay que hacer un trabajo conjunto de urgencia entre los agentes de seguridad, el municipio de Bugaba y Tierras Altas, los dirigentes tradicionales indígenas y empresarios del sector de Tierras Altas, para lograr un cambio de actitud.

No podemos seguir pensando en que son acciones propias de la cultura Ngäbe Bugle, sino ir orientando a estas personas a que se suman a la sociedad, que aporten con sus tradiciones y culturas, pero con el orden, la moral y las buenas costumbres.

Tras el incidente, Andrés Aguilar, corregidor de Volcán, anuncio la verificación del cumplimiento de los horarios de venta y atención en bares, cantinas y parrilladas en Tierras altas, para ver si los empresarios están acatando la normativa.

“Vamos a ser estrictos en que se siga cumpliendo la ley, pero necesitamos que la Policía Nacional nombre a más agentes y dote de mayores recursos a esta institución en Tierras Altas, para que los operativos sean más efectivos”, dijo Aguilar.

Por este incidente no hay personas retenidas. La personería de Bugaba inició las investigaciones del hecho, tomó declaraciones a los agentes policiales y se inspeccionó el auto patrulla destruido.