Reclusos de El Renacer reparan sillas para jóvenes estudiantes del país
Diecisiete detenidos del Centro de Rehabilitación El Renacer trabajan más de 8 horas diarias para reparar cientos de sillas que serán trasladadas a escuelas de difícil acceso.
Todas las mañanas los participantes del programa llegan al taller de ebanistería de la cárcel.
Florentino Gustavo se jubiló de la policía, pero ahora paga una condena por homicidio. Participa del programa Mi Silla Primero y tiene 7 años conmutando pena.
Hace un año fue trasladado de La Joya hacia El Renacer por buen comportamiento.
“Estos proyectos son muy buenos. Uno le pone empeño y aprende lo que no se aprendió afuera”, manifestó Florentino.
La meta del Ministerio de Educación (Meduca) es reparar 10 mil sillas, sin embargo, de 35 que empezaron el proyecto, solo quedan 17. La mayoría de ellos ha salido libre.
“Han sido entregadas 421 sillas. Han sido más de 600 sillas preparadas en los últimos dos meses”, detalló Leonardo Rodríguez, del Ministerio de Educación (Meduca).
Ubaldo Marcussi, ha pagado ya 7 de sus 14 años de condena. Se prepara para estudiar derecho dentro del penal. Decidió ocupar sus horas dentro de la cárcel en algo productivo.
“Así como yo, hay muchas personas que tienen la oportunidad de hacer sillas para niños que pueden ser el futuro de nuestro país”, afirmó Ubaldo.
Las sillas en mal estado fueron donadas por colegios particulares y públicos. Las que estaban dañadas se soldaban y lijaban para luego pintarlas.