¿Ha sido efectivo el manejo de las finanzas públicas?
La repartición del pastel del presupuesto estatal ha sido señalado durante años por aquellos que dicen que manifiestan que no se prioriza en lo que realmente se debe invertir, terminando por hacer una mala distribución de los dineros, pero ¿Cómo se logra esto?
Para el economista Felipe Argote, el Estado debe tener una estrategia que establezca dónde se debe invertir el dinero, además que el presupuesto que se designa sea respetado, trayendo a la mesa lo sucedido con la Asamblea Nacional a la que se le aprobó 143 millones de dólares para el 2022, pero que ha ascendido a más de 200 millones de dólares.
Señaló que el clientelismo sigue existiendo en la Asamblea, porque nadie que no esté en el edificio, salvo algunas excepciones debería estar cobrando un salario como los promotores deportivos. Además, se refirió a los más de 300,000 que siguen recibiendo el bono solidario de forma condicionada.
Aseguró que no existe planificación, porque solo se está pensando en mantener las cosas tranquilas para seguir aprovechándose de la posición que hoy ocupan, sin tener una estrategia que genere una estabilidad, ya que, con el lema de paz social se hizo caer la economía y tampoco se tiene la mencionada paz social.
Argote resaltó que las inversiones del Estado han ido cayendo, mientras que antes se pagaba 8%, ahora se paga 16% en término de deuda, el doble de lo que se pagaba en 2014.
“La deuda sigue subiendo, y no sabemos si esa plata que ponemos para paz social va a ser sostenible, definitivamente que no va a serlo porque no se está produciendo”, aseveró.
Aseguró que de nada sirven los subsidios que dé el Estado si las personas no tienen para comprar, por lo que es necesario generar empleos e impulsar la demanda para generar un efecto cascada en la economía.
Sobre la reducción de la planilla, Argote dijo que va por el camino incorrecto. Señaló a la Asamblea Nacional, donde hay miles de personas nombradas, pero la tendencia será reducir a funcionarios que realmente trabajan y tienen salarios bajos.