Yanquis y Tigres, sorprendidos por la lluvia
A un triunfo de avanzar a la Serie Mundial. Llueva o no, los Tigres de Detroit tendrán que esperar. El cuarto juego de la serie de campeonato de la Liga Americana entre los Tigres y los Yanquis de Nueva York fue postergado el miércoles por la noche debido a un pronóstico de tormenta, aunque el Comerica Park aún estaba seco cuando se tomó la decisión. "Seguían diciendo que iba a llegar y nunca llegó", dijo el pitcher Max Scherzer de los Tigres. Sin embargo, aproximadamente una hora después comenzó a llover intensamente y se empapó la lona que había sido colocada sobre el diamante antes de que el partido se postergara. Con los Tigres en busca de barrer la serie a ganar cuatro de siete, el cuarto partido fue reprogramado para el jueves a las 4:07 de la tarde. Nueva York enviará a su as CC Sabathia al montículo frente a Scherzer. Detroit tendrá disponible al zurdo Phil Coke —que salvó el segundo y el tercer juego— después de un día de descanso. El quinto partido, de ser necesario, se disputaría el viernes en Detroit. Bajo el programa original había una buena posibilidad de que Sabathia lanzara un séptimo juego con tres días de descanso si los Yanquis remontaban en la serie. Ahora podría verse limitado a una apertura, y Nueva York podría necesitar ganar cuatro encuentros en igual número de días si es que quiere llegar a la Serie Mundial. "Uno no puede pensar en el séptimo juego cuando necesita ganar un partido", dijo el dominicano Robinson Canó, segunda base de los Yanquis. El jardinero central Curtis Granderson, a quien el manager Joe Girardi envió a la banca el miércoles junto con el antesalista Alex Rodríguez antes de que el juego fuera postergado, dijo que la inesperada noche libre podría ayudarle a él y a su equipo. "Definitivamente no va a hacernos daño, por ningún motivo", afirmó Granderson. "No hemos jugado bien hasta este momento. ¿Quién sabe? El cambio siempre es algo bueno". El primer lanzamiento del miércoles estaba programado para las 8:07 de la noche, pero poco antes se informó a los aficionados que habría una demora. Después se colocó en la pizarra electrónica un pronóstico meteorológico del área de Detroit, como para explicarle a los fanáticos por qué no empezaba el partido a pesar de que aún había un clima agradable en el estadio.