FILA y el COI discuten lucha en olimpiadas

El jefe interino del organismo rector de la lucha se reunió el jueves con el presidente del COI Jacques Rogge y prometió que el deporte va a trabajar duramente para recuperar su status olímpico. Nenad Lalovic, presidente interino de la FILA, dijo que Rogge le explicó la difícil tarea que enfrenta la lucha en una competencia entre ocho deportes que buscan un puesto en las Olimpiadas del 2020. "Él dijo que todo el mundo tiene que ganarse su puesto", dijo Lalovic en declaraciones a reporteros luego de la reunión de 40 minutos en la sede del Comité Olímpico Internacional. "No veo otra forma", aparte de trabajar duramente, dijo el funcionario serbio, para tratar de convencer al COI a que revierta la recomendación el mes pasado por la junta ejecutiva de eliminar la lucha del programa para el 2020. La misma junta del COI se va a reunir el 29 de mayo en San Petersburgo para recomendar una lista de deportes a ser incluidos. La decisión final va a ser adoptada por el pleno del COI en su asamblea en Buenos Aires en septiembre. El COI emitió una declaración en la que habló de "un encuentro productivo" que incluyó además a su director de deportes, Christophe Dubi. "Se discutió una amplia gama de tópicos y el COI espera continuar la colaboración con la FILA en los próximos meses y en el período antes de las Olimpiadas de Rio 2016", dijo la declaración. Rogge dijo el mes pasado que esperaba una reacción mundial de la comunidad de la lucha a su eliminación del calendario olímpico, y ahora la FILA busca aprovechar el respaldo que ha agrupado a Estados Unidos, Rusia e Irán en una rara muestra de unidad. La frustración y la furia ha llevado a algunos luchadores olímpicos a anunciar que devolverán sus medallas al COI. Lalovic dijo que en sus conversaciones con Rogge dijo que lamentaba que so estuviese sucediendo. "Yo creo firmemente que no es bueno para la lucha. No es algo que vaya a ayudarnos". El jueves, el polaco Andrzej Supron dijo que iba a devolver su medalla de plata de la división ligera de lucha greco-romana, ganada en las Olimpiadas de Moscú en 1980. Sagid Murtazaliyev, de Rusia, y Valentin Yordanov, de Bulgaria, también han dicho que devolverán sus medallas, mientras que el dos veces campeón olímpico Armen Nazaryan se declaró en huelga de hambre hasta que comience este mes el Campeonato Europeo, donde dirigirá al equipo de Bulgaria.