Holanda devora más oro en velocidad
KRASNAYA POLYANA, Rusia (AP) -- Holanda puso broche de oro a una campaña extraordinaria en el patinaje de velocidad de los Juegos de Sochi, al acaparar el sábado los títulos en las carreras de persecución por equipos en ambas ramas. Al bajarse el telón de la disciplina en estos Juegos de Invierno, los holandeses certificaron una colosal cosecha de ocho preseas doradas en 12 pruebas y un gran total de 23 en la disciplina. Superaron por dos oros el récord previo en el patinaje de velocidad, impuesto por la Unión Soviética en 1960. También eclipsaron por diez podios el récord previo fijado por Alemania Oriental en 1988. Lo conseguido por Holanda tal vez no pueda repetirse. Su botín de medallas duplica el total del resto de los países participantes. Estados Unidos, Alemania y Noruega, tradicionales potencias, se despidieron con las manos vacías. "Somos sencillamente el mejor equipo, así que nadie debe sentirse sorprendido", dijo Jan Blokhuijsen, integrante del equipo de persecución masculino que estableció un récord olímpico de 3 minutos y 37.71 segundos para su primer oro en persecución. El equipo femenino, por su parte, se enfiló a la victoria con tres carreras en las que sucesivamente mejoró el récord olímpico, que al final quedó en 2:58.05. Ireen Wust formó parte del cuarteto victorioso y se convirtió en la primera atleta de estos juegos con cinco medallas (dos oros y tres platas). En el penúltimo día de las justas, el austríaco Mario Matt se convirtió en el campeón más veterano en el esquí alpino olímpico, al sorprender a su compatriota Marcel Hirscher. Matt, quien en abril cumplirá 35 años, superó al legendario noruego Kjetil Andre Aamodt, quien tenía 34 años y 170 días cuando ganó el súper gigante en Turín 2006. Al frente tras la primera manga y en una nieve en malas condiciones, Matt se consagró campeón con un tiempo acumulado de 1 minuto y 41.84 segundos. Hirscher quedó segundo, 28 centésimas después y el adolescente noruego Henrik Kristoffersen completó el podio, a 83 centésimas. El 1-2 de Matt y Hirscher permitió que Austria se coronase rey del esquí alpino, con tres oros y nueve en total. Estados Unidos quedó segundo con dos oros y cinco en total. A falta de tres títulos por definir, Rusia subió a la cima de la tabla general de medallas. Los anfitriones alcanzaron los 11 títulos gracias a las victorias del relevo masculino de 4x7,5 kilómetros en el biatlón y de Vic Wild -un estadounidense que en 2011 adoptó la nacionalidad rusa- en el slalom paralelo del snowboard. Wild acumuló su segundo oro de los juegos. Rusia y Noruega tienen 11 oros cada uno, con los de casa acumulando un total de 29 preseas contra las 25 de los escandinavos. Canadá y Estados Unidos les siguen con nueve oros. Marit Bjoergen quedó ahora como la mujer más laureada en la historia de las olimpiadas invernales, con 10 en total. Se colgó el sexto oro de su carrera al liderar una barrida de Noruega en la carrera de 30 kilómetros en el esquí de fondo. Bjoergen dejó atrás a la rusa Lyubov Egorova, otra esquiadora de fondo que ganó seis medallas de oro y tres de plata. La italiana Stefania Belmondo y la rusa Raisa Smetanina (ambas en fondo) también cuenta con 10 medallas, pero menos títulos. En el biatlón, el campeón vigente Noruega estuvo al frente durante buena parte de la final del relevo, pero su número uno Emil Hegle Svendsen falló tres blancos en la última ronda y quedaron en el cuarto lugar. Esto le costó le privó a su compatriota Ole Einar Bjoerndalen del noveno oro de por vida y así erigirse como el atleta con más títulos de la historia de los juegos. Además, la austríaca Julia Dujmovits se llevó el oro en la prueba femenina del slalom paralelo del snowboard. En el duelo por el bronce del hockey masculino, Finlandia vapuleó 5-0 a un desmotivado equipo de Estados Unidos, que un día antes perdió ante Canadá en las semifinales. También se confirmaron dos casos adicionales de dopaje, sumando cuatro en dos días. Los nuevos involucrados son la ucraniana Marina Lisogor (esquí de fondo) y el letón Vitalijs Pavlovs (hockey). Ninguno ganó medallas.