Factores externos encarecen el costo de la vida en Panamá
Economía Panameña
Sugieren que Panamá debe apostar a la atracción de inversión extranjera y pública para dinamizar la economía, y generar empleos.
Los factores externos como el alza del combustible y los fletes, la escasez de productos y la pandemia están provocando un aumento en el costo de vida de los panameños que día a día son testigos de cómo algunos artículos se encarecen, perdiendo la capacidad de adquisición, obligados a cambiarlos por variables.
Cuando el petróleo aumenta desencadena un impacto en la mayoría de los productos que demanda la población, debido a que esta materia prima se convierte en muchos derivados que funcionan como factores de producción, así lo explicó el economista Olmedo Estrada, apuntando a que la subida en los productos alimentarios se da porque algunos fertilizantes son derivados del petróleo.
Estrada destacó que, así como hay productos que han aumentado, también hay otros que mantienen sus precios, por lo que se podría concluir que el encarecimiento de la vida podría ser menor a un 2%, por ende, esto es algo que no afecta mayormente a un país, como ocurre en otros donde además del aumento de los precios experimentan una desvalorización de su moneda.
Mientras que el también economista Felipe Argote advirtió que no se puede hablar de cifras específicas debido a que las autoridades no las publican, dijo que es evidente que hay un gran aumento de precios y eso tiene un efecto directo sobre el poder adquisitivo de las personas, pero esto no es un problema interno, sino mundial.
Luego de que la pandemia diera tregua a los países para reabrir sus fronteras, reactivar sus actividades económicas y empujar hacia adelante tras el parón económico; la economía se ha disparado especialmente en China y Estados Unidos, estimulando el aumento de precios.
“Cuando la economía crece muy rápido, la gente quiere comprar, no hay productos entonces aumentan los precios”, manifestó Argote.
Para el economista, la diferencia que existe entre esos países y Panamá, es que al igual que han aumentado los precios han subido los ingresos, no obstante, aquí están aumentando los precios, pero todavía se sigue en rescisión.
En los últimos meses, Panamá ha reportado un crecimiento de la economía de un 8.2 % a 13.8 %, sin embargo, luego de una contracción de 17.9 % durante el 2020, es por ello que aún no se logra estar al nivel en que se encontraba el país para el 2019, pese a que los ingresos del Estado han mejorado.
De acuerdo con Argote, el país está experimentando una estanflación que pudo haberse evitado si durante el 2020 el gobierno hubiera apoyado el tejido empresarial y social para que cuando se reabrieran las actividades hubiera demanda.
“Panamá lo que tiene en este momento es una crisis de demanda porque no hay trabajo. Y ahora la expectativa que da el gobierno es reducir el poder adquisitivo”, puntualizó.
Claves para la reactivación
Ante la difícil y delicada situación económica que atraviesa el país, los economistas apuestan a la atracción de la inversión extranjera directa y la inversión pública, aunque esta es un poco más complicada en la medida que la recaudación estatal aún no alcanza los niveles del 2019, teniendo en cuenta que para ese momento ya se experimentaba una desaceleración.
Estrada asegura que Panamá no tiene los recursos económicos para invertir y activar la economía, por lo que depende de la inversión extranjera que se pueda originar en países que tienen ahorros y que están buscando donde poner su dinero como Perú y Chile.
Estrada coincide con Argote al decir que para poder impactar la economía y hacerla crecer se debe hacer una inversión de cinco mil millones de dólares anuales, pero el país no cuenta con eso.
“Hay que buscar esos inversionistas que tienen capacidad de invertir en empresas que pongan dinero a mover una economía como la nuestra, pero hay que salir a buscar, tocar puertas a esos países que tienen ahorros suficientes como para invertir 2 mil millones de dólares en proyectos”, expresó.
Una de las más afectadas durante la pandemia fueron las Micro, Pequeña y Mediana Empresas que forman gran parte del tejido empresarial, rezón por la que Estrada también considera importante y necesario buscar mecanismos para apoyar a este sector de la economía que generan gran cantidad de plazas de empleos.
Indicó que estas empresas que han quedado cerradas no han podido conseguir financiamiento en los bancos porque se les exige requisitos con los que no cuentan.
“Este es uno de los problemas por los que la economía no se ha reactivado de una manera dinámica, se está reactivando la economía, pero muy lenta, demasiado lenta y va a tomar varios años para recuperar lo que teníamos antes de la pandemia”, aseveró.
Aseguró que al gobierno no le queda nada para invertir porque no se ha ejecutado una política de reducción de gastos que pudieran llevar al ahorro de dinero en tiempos donde no hay ingresos suficientes, por lo que se está invirtiendo muy poco.
Mientras que, Argote sugiere que es necesario establecer una estrategia de inversión pública fuerte con la activación de proyectos como el cuarto puente, corredor de las playas, entre otros que generen empleos e ingresos a los panameños.
De acuerdo con la Dirección General de ingresos, en octubre Panamá registró un superávit de B/.623.3 millones comparados con el presupuesto.