El banco italiano MPS se desploma en bolsa más de un 8 % tras avisos de BCE

Un trabajador de la Bolsa italiana observa una pantalla en su oficina en Roma, Italia.
Un trabajador de la Bolsa italiana observa una pantalla en su oficina en Roma, Italia. / EFE
Efe
14 de enero 2019 - 09:41

El banco italiano Monte dei Paschi di Siena (MPS) se desplomó hoy en la Bolsa de Milán más de un 10 %, penalizado por las dudas del Banco Central Europeo (BCE) sobre su débil posición de capital y su capacidad para lograr los resultados del plan de reestructuración.

El BCE alertó el viernes de que MPS, el banco más antiguo del mundo, tiene una serie de debilidades en lo que respecta a la "capacidad de lograr los objetivos del plan de reestructuración", según un comunicado publicado en la web del banco toscano.

Además, resaltaba "los importantes desafíos planteados por el plan de reestructuración a nivel financiero" y dudaba de "la capacidad de MPS para implementar con éxito su estrategia, dada la turbulencia actual en los mercados italianos".

Según el BCE, la entidad debe trabajar para "mejorar su rentabilidad" y su "posición de capital".

Como consecuencia, este lunes MPS no conseguía marcar precio al inicio de las contrataciones en la bolsa milanesa, al acumular una caída teórica del 6,3 %.

Pasada media hora de la apertura de la bolsa, MPS ha podido iniciar su cotización pero al mediodía la ha visto suspendida, cuando se hundía más de un 10 %.

A las 14.00 horas locales (13.00 GMT), el título acumulaba unos retrocesos del 8,73 % y sus acciones se intercambiaban a 1,3755 euros.

A la situación delicada que atraviesa el banco italiano Carige, se suma ahora este nuevo revés, que no era esperado por el mercado y ante el que los inversores han reaccionado con las ventas.

El MPS fue recapitalizado cautelarmente en 2017, por el entonces Gobierno del Partido Demócrata (PD, centroizquierda), un plan de ayuda con dinero público que fue aprobado por Bruselas y cuyo objetivo era brindar a la entidad los recursos necesarios para acometer una reestructuración profunda y sanear sus cuentas.

Uno de los mayores problemas que presentaba era la gran cantidad de préstamos improductivos que acumulaba, con lo que en los últimos tiempos ha puesto en marcha un proceso de reestructuración y en mayo de 2018 informó de que había completado el proceso de titulización para la venta de una cartera de 24.100 millones de euros en préstamos morosos.

El subsecretario para la Presidencia del Gobierno, Giancarlo Giorgetti, ha dicho recientemente que el Ejecutivo italiano, formado por la coalición populista del Movimiento Cinco Estrellas y la ultraderechista Liga, confía en que el banco "haya resuelto todos sus problemas", pero subrayó que si no ha sido así, el Gobierno "actuará de forma responsable".

"Tenemos que lidiar con el legado de un sistema bancario con estos problemas. No vamos a huir, los problemas tienen que ser enfrentados", ha señalado a los medios.

Mientras, el banco italiano Carige fue intervenido por el BCE el pasado 2 de enero, después de que no consiguiera aprobar una ampliación de capital de 400 millones de euros y la emisión de bonos por valor de 320 millones de euros, un fracaso que derivó en la posterior dimisión de la mayoría de sus directivos.

Actualmente está gestionado por tres administradores, nombrados por el BCE, que han confirmado que solicitarán la garantía estatal para la emisión de bonos que ha ofrecido el Gobierno italiano, pero han rechazado por el momento que la entidad sea recapitalizada cautelarmente.

Temas relacionados

Si te lo perdiste
Lo último
stats