Chris Pratt evoluciona como protagonista en "Jurassic Park"

Pratt da vida a Owen Grady, un militar convertido en entrenador de velociraptors en un parque de diversiones que se convierte en un caos. Si su personaje de "Guardianes", Peter Quill, fuera Han Solo, Owen Grady es Indiana Jones: un poco más serio, un poco menos libertino y definitivamente nada tonto.

En una tarde reciente en un estudio de Universal, Chris Pratt entretenía a un grupo de periodistas con un cuento sobre caza de alces cuando una ráfaga de viento derrumbó abruptamente una enorme planta ficticia y un parlante igualmente grande, que se dirigían hacia un reportero a gran velocidad.

Todos resollaron pero permanecieron en sus asientos. Todos menos Pratt, quien salió corriendo con expresión seria, listo para ayudar como pudiera.

No hubo mucho que hacer en este caso. La planta y el altoparlante no dieron con el reportero. Pero al actor no le falló el instinto.

El perenne secuaz bobo convertido en actor principal no es sólo un héroe de la pantalla. Al parecer también tiene muy buenas cualidades en la vida real.

"Así es él. Se hace responsable del bienestar de quienes lo rodean", dijo la actriz Bryce Dallas Howard, quien junto con Pratt protagoniza "Jurassic World".

En el plató, las cosas no fueron distintas.

"Es más gracioso y encantador cuánto más difícil la situación. Verdaderamente quiere que todo el mundo la pase bien", dijo el director Colin Trevorrow.

Aun después de chocar su motocicleta en el set de Jurassic, Pratt insistió en asegurarle al elenco y equipo de rodaje que el show debía continuar.

"Eso sí me sacudió", recordó en una entrevista. Fuera de cámara, la moto se trancó cuando frenó sobre un poco de lodo, y el actor salió disparado seis metros (20 pies).

"Inmediatamente estaba enjambrado por todos", relató. "Cuando estás en una película y hay tanto dinero involucrado, ¿debe lesionarse tu estrella? ... Les dije, 'Miren chicos, tienen que relajarse un momento. ¿Estoy bien? ¿Cómo podría saberlo? Denme un día y les digo. Ahora parece que estoy bien'''.

Howard, como actriz y como hija del cineasta Ron Howard, se ha codeado con los nombres más grandes de la industria toda su vida, y no le gusta la sobreutilizada y subestimada etiqueta "estrella de cine". Prefiere términos como "reconocible" y "conocido" y cree que quizás en total han existido 15 verdaderas estrellas en la historia del cine.

Pratt, sin embargo, clasifica como una.

Hace unos años las cosas eran muy distintas para él. Tenía un trabajo estable como el afable Andy Dwyer en la serie de NBC "Parks and Recreation" y aparecía en una que otra película, pero usualmente como el compinche bobo.

Todo cambió en el 2014. Con papeles protagónicos tanto en "The Lego Movie" y la propiedad poco conocida de Marvel "Los Guardianes de la Galaxia", tuvo su prueba de fuego. ¿Puede llevar el peso de una película sobre sus hombros? ¿Responderá el público?

La respuesta fue inequívocamente positiva. "Guardianes" fue la tercera película más taquillera del año y "The Lego Movie" la quinta. Ambas tendrán secuelas.

Ahora Pratt enfrenta otra gran prueba con "Jurassic World", la cuarta entrega de la serie "Jurassic Park" que Steven Spielberg lanzó en 1993, que se estrena el viernes.

Pratt da vida a Owen Grady, un militar convertido en entrenador de velociraptors en un parque de diversiones que se convierte en un caos. Si su personaje de "Guardianes", Peter Quill, fuera Han Solo, Owen Grady es Indiana Jones: un poco más serio, un poco menos libertino y definitivamente nada tonto.

Mientras indaga en proyectos de más alto perfil, Pratt se preocupa por hacer películas que no sólo "apunten al centro". Quiere que el público realmente sienta que los ingresos no son el único objetivo o el más importante. Tampoco se adjudica el éxito de una película.

La fama y el estrellato pueden ser efímeras, y a Pratt le gusta mantener las cosas simples. Recientemente publicó una graciosa "disculpa" en su página de Facebook "por cualquier cosa que termine diciendo durante la próxima gira de prensa de 'Jurassic World'''. Estaba consciente de los varios "escándalos" que generaron entrevistas recientes con los elencos de "Avengers" y otros filmes.

También se robó su vestuario de Owen del plató. Le dijo a Howard que le gustaría usarlo para visitar a niños en hospitales.

La fama trae consigo algunos inconvenientes, pero Pratt, quien está casado con la actriz Anna Faris, lo sabía de entrada.

"No me gusta mucho en lo que se refiere a mi vida privada y la disminución de mi espacio personal, pero por otro lado, ahora estoy en una lista corta que me da acceso a cineastas y material increíbles", expresó. "Sólo espero no encontrarme nunca quejándome de eso".