5 razones por la que Ciudad Cruel es el Novelón del año
Ciudad Cruel
Con el estreno de Ciudad Cruel se vive un efecto único en la televisión, un nivel de alcance y fidelidad que solo los grandes eventos alcanzan.
Aquí te traemos 5 razones por las cuales la novela del Prime Time de TVN tiene todo para posicionarse como la absoluta favorita.
Nedim: la resiliencia de un alma pura
Desde un principio llamó la atención la historia de Nedim, el sobrino cuadrapléjico de Agah Karacay, y que precisamente es protagonista de la historia, estando inmovilizado en una silla de ruedas, sin poder hablar.
Este personaje vive una tragedia griega. Sus padres mueren cuando él era un niño, su primo lo tira por la ventana víctima de la manipulación de su madre, se pasa 20 años de su vida sentado en una silla de ruedas sin apenas poder comunicase, vive prácticamente aislado con la única compañía de su tío y la leal Nurtan, su tía lo maltrata y envenena sistemáticamente, lo casan a la fuerza, la mujer que quiere se casa con el primo que lo tiró por la ventana… En resumen, la vida de Nedim ha tenido muchas más espinas que rosas. Pero con la llegada de Cemre todo cambia, y se abre para él un mundo nuevo.
Cenk: el rebelde guapo
Si Nedim tiene un arco de evolución importante, Cenk no se queda atrás. El personaje que interpretó Ozan Dolunay fue presentado como un niño rico mucho más aficionado a la fiesta que a la empresa, más proclive a los excesos que a la familia, más preocupado por sí mismo que por los demás.
Sin embargo, hizo falta poco tiempo para descubrir que esa solo era la fachada que escondía un profundo dolor. Si Nedim sufrió 20 años en una silla de ruedas, Cenk sufrió 20 años de silencio. El Cenk niño sufrió la ausencia de un padre más preocupado por la empresa familiar que por la familia.
El Cenk adolescente sufrió el cargo de conciencia de creerse un monstruo por haber tirado a su primo por la ventana. El Cenk hombre sufrió el dolor de saberse no amado por la mujer que amaba.
Cemre: la desestabilizadora
Si la relación de Nedim y Cenk ya era complicada desde la infancia, la llegada de Cemre no hizo más que agravarla, al enamorarse ambos de ella. Cemre llegó a la mansión Karaçay pisando muy fuerte. Fue entrar en la habitación de Nedim y se tambaleó todo el universo familiar. Ella vio perfectamente lo que sucedía y ni se calló ni se acobardó. Cemre luchó con todas las armas que tenía para proteger a Nedim de Seniz, y de quien se metiera con él.
Ceren: ni tan buena, ni tan villana
Cerem, la hermana de Cemre, entró en la mansión Karaçay queriendo ser Damla (guapa, millonaria e influencer), pero se convirtió en Seniz (falsa, manipuladora y repudiada). Eso sí, justo es reconocer, que un importante porcentaje de la avaricia y ambición de Cerem es responsabilidad de Neriman. Las pocas veces que Cerem quiso ser mejor persona, ahí estaba su abuela para recordarle la ropa de marca, los perfumes caros y las comodidades de la mansión.
Seniz: la villana de la década
Torturando al sobrino de su esposo, Seniz no solo era consciente de que vivía dentro de una mentira, sino que además alimentaba la falsa apariencia de familia feliz con mil y una manipulaciones. Seniz lastimó a todos y cada uno de los personajes de esta historia. Porque Seniz solo pensaba en Seniz. Por mucho que se justificara diciendo que actuaba como madre para proteger a sus hijos, Seniz pensaba única y exclusivamente en proteger su estatus como señora Karaçay.
No te pierdas Ciudad Cruel de lunes a viernes a las 9 de la noche por TVN.