Deleite de una noche en concierto de la Orquesta Filarmónica de Israel
La Orquesta Filarmónica de Israel, considerada una de las mejores del mundo, dio el privilegio a Panamá de poder escucharla en vivo, por más de dos horas, en el Centro de Convenciones Atlapa, la noche de este jueves 25 de julio.
El escenario del Teatro Anayansi se llenó con la presencia de los músicos sobre las 8:15 p.m. Todos muy sobrios, pero a la vez impecables, preparados para encantar al público. Minutos más tarde: la aparición del director Zubin Mehta, por supuesto, arrancando los aplausos y uno que otro grito de parte de los presentes.
Saluda al público, a sus músicos y se voltea para iniciar el espectáculo.
Cuando el maestro alzó la batuta, todos esperaban escuchar la primera pieza descrita en el programa: “Concertino para cuerdas de Partos”, pero no, fueron las notas del Himno Nacional de Panamá, descrito por algunos como “un gran gesto de parte de la filarmónica y del director”. También entonaron el Himno de Israel, conocido también como "Hatikvah".
Al terminar de dirigir, salió del escenario, mientras los músicos se organizaban. Mehta regresa, ahora sí, para dirigir el Concertino para cuerdas de Partos. Seguido, la Sinfonía No 3 de Schubert. Los aplausos y ovación en el teatro, no hicieron falta ante la sublime presentación.
De allí, hubo un intermedio, lo que se escuchaba entre rumores, eran impresiones positivas y también de quienes aún no terminaban de llegar al clímax con las interpretaciones, pues sabían que estaban ante un gran director musical, premiado en muchas ocasiones y que ha conducido múltiples orquestas alrededor del mundo.
Después del receso, siguió la interpretación de la Sinfonía Fantástica de Belioz, con lo que se esperaba el fin del al concierto. Metha se retiró del escenario, pero nuevamente sorprendería, regresando para interpretar una Obertura de Strauss.
La actual, es la última gira de la Orquesta Filarmónica de Israel, bajo la dirección del maestro Mehta.
La orquesta fue creada en 1936 por Bronislaw Huberman y en su concierto inaugural, el 26 de diciembre de ese año fue dirigida por Arturo Toscanini.