Prueba de ADN revela que vivió con la familia equivocada por 64 años

Un descubrimiento fortuito en un sitio web de genealogía transformó por completo la vida de Kevin McMahon, un hombre de 64 años que durante toda su existencia sintió que no encajaba en su propia familia. Hoy, seis décadas después de su nacimiento, afirma que fue víctima de un error inconcebible: fue entregado por error a la familia equivocada al nacer. Ahora, ha iniciado acciones legales contra el Centro Médico del Hospital Jamaica, en Queens, Nueva York.

La historia comenzó con una prueba de ADN rutinaria en Ancestry.com, realizada por su supuesta hermana, Carol Vignola, quien notó algo desconcertante en los resultados: el sistema identificó a un hombre llamado Ross McMahon como su hermano biológico. Intrigada, Carol investigó más y descubrió que tanto Kevin como Ross habían nacido el 26 de mayo de 1960, con solo dos horas de diferencia y en el mismo hospital. Para aumentar la sospecha, los números en sus certificados de nacimiento eran consecutivos.

Alarmada por la coincidencia, Carol compartió su hallazgo con Kevin, quien también decidió realizarse la prueba. El resultado fue devastador: no compartía lazos biológicos con ninguna de las personas que creía su familia, ni con Carol, ni con su sobrina, ni con nadie más. En cambio, el ADN lo conectó con un desconocido: Keith McMahon, su hermano biológico.

Este giro inesperado dejó a Kevin con más preguntas que respuestas. En declaraciones al New York Post, confesó: “Era como la pieza que faltaba en el rompecabezas. Explicaba todo sobre por qué mi infancia fue como fue”.

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La revelación trajo consigo dolorosos recuerdos de su niñez. Kevin contó que su abuela paterna lo trataba de manera distinta a sus tres hermanos. Ahora lo entiende: “Ella creía que yo no era hijo de mi padre, y tenía razón. Me hizo sentir inútil. Destruyó mi confianza”, reveló.

Pero el golpe más duro llegó al enterarse de cómo fue la infancia del hombre con el que, según los resultados, fue intercambiado al nacer: Ross McMahon. “Lo adoraban”, relató Kevin. “Mi hermano de sangre, Keith, me dice que mi padre biológico era el mayor fan de Ross, que lo apoyaba, que siempre lo apoyaba, que siempre estaba ahí. Me hubiera encantado tener eso”.

El impacto emocional de este descubrimiento ha sido tan profundo que Kevin ahora demanda al hospital donde ocurrió el supuesto error por los daños sufridos, incluyendo el dolor emocional derivado de haber crecido en un entorno al que nunca perteneció verdaderamente.

Hasta el momento, el Hospital Jamaica de Queens no ha emitido ninguna declaración pública respecto al caso. Aunque Kevin ya ha conocido a parte de su verdadera familia biológica, este encuentro tardío no borra el trauma de toda una vida vivida desde una identidad equivocada. Su historia deja al descubierto la fragilidad de lo que creemos seguro: el hogar, los lazos familiares y la verdad de quiénes somos.