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Una pareja tuvo que soportar una experiencia inimaginable, viajar durante cuatro horas junto al cadáver de una pasajera.
El trágico incidente ocurrió cuando una mujer, que acababa de salir del baño, se desplomó inesperadamente en el pasillo. La tripulación actuó de inmediato, pero no pudieron reanimarla. “Desafortunadamente, la mujer no pudo ser salvada, lo cual fue bastante desgarrador de ver”, relató Mitchell Ring, uno de los pasajeros, en una entrevista internacional.
Ante la situación, la tripulación intentó trasladar el cuerpo a la clase ejecutiva, pero el tamaño de la fallecida y la estrechez del pasillo impidieron el movimiento. La única solución fue colocarla en un asiento vacío junto a Mitchell Ring y su acompañante. “Parecían un poco frustrados, luego solo me miraron y vieron que había asientos disponibles a mi lado. Me dijeron: ‘¿Puedes moverte, por favor?’ y yo dije: ‘Sí, no hay problema’. Luego colocaron a la señora en la silla en la que yo estaba”, relató Ring.
Lo que siguió fue una experiencia angustiante. La pareja permaneció junto al cadáver durante el resto del vuelo. “No puedo creer que nos dijeran que nos quedáramos… No fue agradable”, expresó Ring, aún conmocionado.
El caso ha generado un intenso debate sobre los protocolos de manejo de fallecimientos a bordo de vuelos comerciales. Según la Asociación de Transporte Aéreo Internacional (IATA), en estos casos, el cuerpo debe ser colocado en un asiento cercano con pocos pasajeros y cubierto con una manta o una bolsa especial. Sin embargo, la experiencia vivida por Ring y su acompañante pone en duda la efectividad de estos procedimientos.
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“No entiendo cuáles son los protocolos, pero quedé en ‘shock’ y simplemente esperé con terror a que el avión aterrizara”, confesó Ring. La pareja expresó su intención de buscar apoyo psicológico para lidiar con el trauma vivido. “Tienen el deber de cuidar a sus clientes, así como a su personal. Realmente no sé cómo me siento y me gustaría hablar con alguien para asegurarme de que estoy bien”, agregó Ring.
Tras la controversia, Qatar Airways emitió un comunicado expresando sus condolencias a la familia de la pasajera fallecida y disculpándose por cualquier inconveniente causado. “Estamos en proceso de contactar a los pasajeros afectados de acuerdo con nuestras políticas y procedimientos”, declaró un portavoz de la aerolínea.
El testimonio de Mitchell Ring se ha vuelto viral en redes sociales y ha generado una conversación global sobre la necesidad de revisar los protocolos para el manejo de situaciones tan excepcionales en vuelos comerciales.
“Estoy tratando de sacar lo mejor de una situación bastante difícil, pero, ya sabes, estamos de vacaciones, así que realmente estamos tratando de pasar un buen rato”, concluyó Ring, reflejando la lucha por recuperar la normalidad tras una experiencia tan traumática.
Este incidente expone una realidad poco discutida sobre la industria de la aviación y plantea preguntas urgentes sobre cómo manejar de manera digna y respetuosa situaciones de fallecimiento a bordo, protegiendo también el bienestar emocional de los pasajeros.