El hombre que recorrió medio millón de kilómetros durante 24 años en busca de su hijo secuestrado
Tráfico de menores
Cada año decenas de miles de niños infantes son secuestrados en China para venderlos a otras familias, o en el peor de los casos, para traficar con órganos. El gobierno de Pekín por años trató el problema con pinzas, mientras los organismos internacionales poco han hecho para acabar con este flagelo.
Al trauma emocional que supone la pérdida de un hijo, se suma el costo económico de las familias dispuestas a todo por encontrar a sus hijos.
Miles de casos aún se encuentran sin resolver, y sólo un mínimo porcentaje logra recuperar a sus hijos. Este es el caso de Guo Gangtang que luego de 24 años y recorrer medio millón de kilómetros por toda China logró reencontrarse con su hijo secuestrado.
La vida de este hombre chino cambió para siempre en 1997,cuando su hijo de dos años Guo Xinzhen fue secuestrado por traficantes de personas frente a su casa en la provincia de Shandong.
Fue entonces cuando decidió montarse en una motocicleta y recorrer más de 20 regiones del país persiguiendo pistas que le pudieran guiar hacia el paradero de su hijo.
Sufrió accidentes de tráfico, se le averiaron 10 motos e incluso se tuvo que enfrentar con ladrones de carretera.
Pero nada de eso lo detuvo. Llevando pancartas con la foto de su hijo, el hombre continuó la búsqueda, durmiendo bajo puentes y gastándose los ahorros de su vida para cumplir su misión.
Es difícil saber cuántos niños son robados cada año. El número oscila entre 10 mil y 20 mil, según fuentes extraoficiales. La mayoría nunca vuelve a ver a sus familias. El Gobierno solo da cifras de los que son rescatados, y las organizaciones internacionales tampoco quieren entrar en detalles, dada la sensibilidad del tema.
El ADN fue decisivo
Según el Ministerio de Seguridad Pública de China, la policía pudo rastrear la identidad de su hijo mediante pruebas de ADN.
Más tarde, dos sospechosos de haber llevado a cabo el secuestro fueron localizados y arrestados, según informa el medio Global Times.
Y de acuerdo a otro reporte de China News, en aquel momento los ahora detenidos eran pareja y su intención habría sido abducir al niño para luego venderlo.
De acuerdo a la versión policial que citan dichos medios, al ver al hijo de Guo Gangtang jugando solo afuera de su casa, uno de los dos detenidos, una mujer identificada por su apellido Tang, lo agarró y lo llevó a la estación de autobuses, donde lo esperaba su compañero, de apellido Hu.
Luego, la pareja tomó un autobús interurbano a la vecina provincia de Henan y lo vendió allí. Los informes de los medios locales dicen que el hijo de Guo fue encontrado todavía viviendo en ese lugar.
El tráfico humano, el mayor flagelo de la cultura china
Los secuestros de niños son un gran problema en China, pues cada año desaparecen decenas de miles de ellos. Hace décadas que se vienen escuchando casos de bebés traficados.
Según un cálculo hecho en 2015, al año se secuestran unos 20.000 niños China. Muchos de ellos se venden para adopción, tanto dentro del país liderado por Xi Jinping como en el extranjero.
Luego de reencontrarse con su hijo, Guo Gangtang le dijo a los periodistas: "Ahora que han encontrado a mi niño, todo será felicidad".
A lo largo de estos años, el hombre se ha convertido en un miembro destacado de las organizaciones de personas desaparecidas en China y ha ayudado al menos a siete padres a reunirse con sus hijos secuestrados.
Tan pronto como se supo la noticia de que habían localizado al hijo de Guo, las redes sociales chinas se inundaron de mensajes en apoyo al padre.
"Muchos padres probablemente se habrían rendido hace mucho tiempo. Es tan increíble y estoy realmente feliz por él", escribió una persona en la plataforma Weibo.
El caso de Guo Gangtang inspiró una película en 2015, llamada Lost and Love,que fue protagonizada por el reconocido actor chino Andy Lau.
Algunos personas han pedido por redes sociales que se realice una secuela del filme para agregar este inesperado final feliz.