Rebeldes aceptan que ONU revise petrolero por grave riesgo de marea negra en Yemen
Los rebeldes hutíes aceptaron una inspección por un equipo de la ONU de un petrolero abandonado frente a Yemen con una carga de 1,1 millón de barriles de crudo que podrían provocar una marea negra inédita en el Mar Rojo.
El "FSO Safer", de 45 alos, está anclado desde 2015 frente al puerto de Hodeida, controlado por los rebeldes hutíes, que impedían hasta ahora que los expertos de la ONU pudieran inspeccionar el navío.
Apenas se han efectuado operaciones de mantenimiento en el carguero desde que la guerra estalló, hace más de cinco años, entre los hutíes, apoyados por Irán, y el gobierno, respaldado por una coalición liderada por Arabia Saudita.
Ellos "aprobaron oficialmente una visita del barco por un equipo de evaluación y reparación de la ONU", declaró el domingo a la AFP una fuente de la organización internacional.
El petrolero abandonado podría quebrarse en cualquier momento y provocar un desastre ecológico sin precedentes, según expertos internacionales.
El Consejo de Seguridad de la ONU llevará a cabo una reunión especial el 15 de julio sobre el tema, luego de que se detectó un vía de agua en la sala de máquinas, "lo que podría llevar a un desastre", según Stéphane Dujarric, portavoz del secretario general de la ONU.
Si los expertos pueden acceder al barco, efectuarán pequeñas reparaciones y determinarán las etapas que se tienen que seguir, añadió el viernes el portavoz.
"Esperamos que se tomen rápidamente las disposiciones logísticas para que este trabajo pueda empezar", dijo.
El "Safer" podría causar "el peor desastre medioambiental a nivel regional", advirtió por su parte el gobierno yemení.
Un alto dirigente rebelde, Mohamed Ali Al Huthi, pidió en junio en Twitter la garantía de que el navío sería arreglado y que el valor del petróleo a bordo sería para los trabajadores hutíes.
El cargamento está evaluado en 40 millones de dólares, la mitad del valor estimando antes de la caída del precio del petróleo. Según algunos expertos, el monto es inferior porque es un producto de mala calidad.
El primer ministro de Yemen, Main Abdelmalek Said, urgió el jueves a la comunidad internacional a castigar a los hutíes por haber bloqueado la inspección de la ONU, y declaró que el valor del petróleo debería destinarse al sector sanitario y a proyectos humanitarios.
- Una bomba de relojería -
Además de la corrosión, los gases del hidrocarburo podría explotar en las cubas y se detectó en mayo un escape en un tubo de enfriamiento.
"El tubo estalló, y envió agua a la sala de máquinas, lo que crea una situación realmente peligrosa", declaró Ian Ralby, presidente de IR Consilium, un gabinete de cuestiones marítimas que sigue el caso de cerca.
Un equipo de Safer Exploration and Production Operations, una compañía petrolera controlada en parte por los hutíes, envió a submarinistas para arreglar el escape, y evitaron por poco el naufragio del navío, explicó.
El secretario de Estado norteamericano, Mike Pompeo, advirtió recientemente que si el petrolero se quiebra, "devastará el ecosistema del mar Rojo" y perturbará las principales vías de navegación. "Los hutíes tienen que acordar el acceso antes de que esta bomba de relojería explote", declaró.
Si el barco se parte, "tendrán dos catástrofes", alertó Lise Grande, coordinadora humanitaria de la ONU para Yemen. "Habrá una catástrofe ecológica inaudita (...) y una catástrofe humanitaria porque el petróleo hará que el puerto de Hodeida no se pueda utilizar", declaró a la AFP.
El grupo ecologista yemení Holm Akhdar (sueño verde, en árabe) advirtió por su parte que una marea negra podría extenderse hasta el golfo de Adén y el mar de Arabia.
La región necesitaría 30 años para recuperarse y unas 115 islas del mar Rojo perderían sus hábitats naturales, según este grupo.
En un país donde la mayoría de la población depende de la ayuda, se estima que 126.000 pescadores, de los cuales 68.000 en Hodeida, perderían su fuente de ingresos.