Clero de Ecuador condena casos de corrupción en medio de la pandemia
La Conferencia Episcopal de Ecuador consideró el sábado un "crimen" la "escandalosa proliferación de casos de corrupción" en medio de la pandemia de coronavirus que azota al país.
"La corrupción es un crimen que condena a muerte a muchas personas necesitadas, hoy más que nunca, de vida, trabajo y oportunidades", dijo el clero en una "carta abierta al pueblo que peregrina en el Ecuador".
La Fiscalía indaga en Quito y Guayaquil una veintena de casos de supuesta corrupción en el sistema hospitalario durante la pandemia, que deja más de 53.800 casos y unos 4.400 muertos confirmados de covid-19 en el país.
"¡Cuántas cosas buenas se podrían hacer con el dinero de la corrupción!", dijo la iglesia, al indicar que "los recursos públicos disponibles se ven mermados, lo cual se ha traducido en deficiencias en las atenciones sanitarias".
El episcopado agregó que "esta dura realidad no es de hoy, sino que viene de lejos, como tampoco es exclusiva de políticos o altos funcionarios, pues, lamentablemente, (la corrupción) se ha extendido a las costumbres de todos los estratos sociales".
Hace dos semanas, la Justicia ordenó la detención de dos hijos del expresidente Abdalá Bucaram Ortiz (1996-1997), Dalo y Michel, por presuntas irregularidades en la compra de implementos para hospitales públicos durante la pandemia.
La familia Bucaram ha sido señalada por su supuesta relación con el empresario local Daniel Salcedo, involucrado en el caso de sobreprecios en compras de insumos para hospitales de la seguridad social.
El exmandatario -destituido por el Congreso, que en febrero de 1997, a los seis meses de iniciado su mandato, lo acusó de "incapacidad mental"- se encuentra bajo arresto domiciliario desde el 4 de junio, tras un allanamiento a su residencia vinculado a la pesquisa por corrupción en los hospitales públicos.
Salcedo, quien el lunes 8 de junio intentó infructuosamente huir del país en una avioneta que se estrelló en Tumbes, Perú, sobrevivió al accidente, fue repatriado y permanece detenido por la policía ecuatoriana en un hospital.
Por el presunto tráfico de influencias en adquisición de insumos médicos también se investigaba a Carlos Luis Morales, prefecto (gobernador) de la provincia del Guayas, cuya capital es Guayaquil, quien falleció el pasado lunes de un infarto.
Igualmente se han realizado otras pesquisas en Quito por cuestionados contratos de productos de bioseguridad, en tanto la exdirectora del estatal Servicio Nacional de Gestión de Riesgos de Ecuador (SNGRE) Alexandra Ocles es indagada por una inconclusa compra con sobreprecio de alimentos para afectados por la pandemia.