Advierten que la Asamblea quiere politizar el proceso de nombramiento de los médicos internos
El decano de la Facultad de Medicina de la Universidad de Panamá, Enrique Mendoza, reaccionó a la iniciativa legislativa que busca flexibilizar la certificación que homologa a los estudiantes de medicina que quieran ejercer en el país.
Explicó que la certificación para egresados de las facultades de medicina surgió de una iniciativa del Ministerio de Salud (Minsa) hace 27 años, que fue aprobada en el 2004, se empezó a implementar en el 2014 y establece mecanismos para ingresar y permanecer en el sistema de salud, catalogándola como una ley de visión de Estado.
“Esta ley es el resultado de los esfuerzos de cuatro administraciones y los consensos de los profesionales de la salud, no puede ser modificada sin un proceso de consulta con los profesionales de la salud y las instituciones como el Ministerio de Salud, y el Consejo Técnico de Salud”, indicó Mendoza
El decano manifestó que las razones por la que se aprueba esta ley es para garantizar la seguridad del paciente, darle una atención oportuna, adecuada y científica al más alto nivel, lo que es muy importante en un país donde tenemos una historia de tragedias en el sector salud que expresaban una falla en la garantía de una atención segura al paciente.
“El mensaje que está diciendo la Asamblea Nacional es: no nos interesan los mecanismos que garanticen la seguridad de los panameños”, señaló Mendoza.
Aseguró que “la posición de la Universidad de Panamá es muy clara, no estamos de acuerdo con este proyecto de ley porque es contrario a los intereses de nuestros compatriotas de tener la mejor atención de salud”.
Detalló que hasta el 2014, el proceso de nombramiento de internos en el primer y segundo año podía estar sujeto a la politización, o sea, entraban primero aquellos que tenían influencias y relaciones económicas sociales o políticas, mientras que desde el 2015 se dan de acuerdo con el puntaje del examen de certificación.
“Esto significa, que con este proyecto la Asamblea lo que quiere es politizar el proceso de nombramiento de los internos y volver al pasado donde aquellos que tenían influencias entraban primero o iban donde ellos querían y no se basaban en mérito académico”, aseveró Mendoza.
Señaló que, en el 2020, 400 médicos internos ingresaron a los hospitales docentes, luego de que aprobaran el examen de certificación.
El 1 de febrero ingresaron 196 nuevos médicos internos para aumentar la capacidad de respuesta del sistema de salud y estamos trabajando para que el 1 de abril ingresen 200 nuevos médicos residentes pasando el examen de certificación.
Resaltó que es necesario que se aprendan las lecciones que nos ha dejado la pandemia como tener un buen sistema de salud y para ello es necesario un buen sistema de formación de médicos.
Mendoza hizo el llamado al presidente Laurentino Cortizo para que intervenga y se acelere el proceso de construcción de la nueva facultad de medicina. Recalcó que más de 3 mil estudiantes se presentaron para ingresar a la facultad de medicina y solo se pueden aceptar a 200 estudiantes.
Para Mendoza, uno de los daños colaterales más importantes que ha provocado la pandemia es a la educación y los diputados deberían estar preocupados por dotar a las escuelas de los recursos necesarios para poder reabrirlas adoptando las medidas de mitigación del virus.
Reiteró que el examen de certificación y recertificación ha marchado muy bien y el diputado proponente ni siquiera se ha presentado a preguntar cuáles han sido los resultados, negó que a los estudiantes se les exija saber sobre epidemiología norteamericana, asegurando que Costa Rica adoptó el modelo de Panamá de examen de certificación para dar las plazas de internado.