Condenan a tres hombres por tráfico de huevos de tortuga en Los Santos

Tres hombres fueron condenados en Los Santos a 48 meses (4 años) de cárcel por el delito de tráfico de huevos de tortuga.

Sin embargo, en el juicio se llegó a un acuerdo de pena y los responsables deberán pagar 300 días multa, a razón de $2 por día, es decir que al final deberán pagar $600, explicó Bolívar Domínguez, director regional del Ministerio de Ambiente en la provincia de Los Santos.

Los hechos se dieron el 27 de octubre, cuando agentes de la Policía Nacional (PN), sorprendieron a Humberto Antonio García, Jacinto Cedeño Alonso y a Ostoquio Cedeño Pérez con un cargamento de 2,623 huevos de tortuga, en bolsas dentro del maletero de un taxi.

Biólogos de la Dirección del Ministerio de Ambiente (MiAmbiente), en Los Santos, destruyeron los huevos, ya que determinaron que no estaban aptos para la siembra.

La audiencia en la que se condenó a los tres ciudadanos se realizó este domingo 30 de octubre de 2016.

Este no es el primer caso en el que se logran condenas por tráfico de huevos de tortugas: en el transcurso del 2016 se han dado ya tres audiencias por el mismo delito contra el ambiente. En los tres casos se han logrado acuerdos de pena, informó Rodríguez.

Sin embargo, la sociedad civil cree que es necesario más que eso. En Guánico Abajo, un poblado costero en Tonosí, un grupo ambiental pidió a MiAmbiente respaldo para ampliar un proyecto de protección de tortugas.

El movimiento ProTortugas cree que es fundamental construir un vivero y revivir una casa pequeña del ministerio en la playa de Guánico, para utilizarla como centro ecoturístico y zona de vigilancia de huevos de tortugas.

En Cambutal, otro poblado de Tonosí, han exigido, por su parte, seguridad para las cuatro playas en la que las tortugas marinas desovan.

Estos últimos están molestos: sólo en septiembre fueron extraídos de nidos de la zona unos 9,750 embriones.

El año pasado, México desplegó seis drones en zonas de desove del estado de Oaxaca, para captar a los cazadores y judicializarlos.

En Panamá, además, en agosto pasado el Instituto Smithsonian advirtió que el consumo de huevos de tortuga panameña es “altamente peligroso”.

Según un estudio científico, esos productos ienen un alto contenido de metales tóxicos como el cadmio, relacionado a enfermedades como la osteoporosis y el fallo renal.