Tanques sépticos, lixiviados del vertedero y coliformes fecales: la peligrosa mezcla en los ríos de Azuero
“Hemos determinado que el foco está en la cuenca media del río La Villa. Ahí se encuentran los puntos críticos de contaminación”, afirmó Marilyn García Paredes, directora de Verificación de Desempeño Ambiental del Ministerio de Ambiente
Los Santos/Desde hace dos semanas las alertas se han encendido en la región de Azuero, pues se ha visto afectada por el suministro de agua potable debido a la contaminación en los afluentes del río Estibaná, lo que ha obligado a las autoridades a iniciar investigaciones.
Aunque esta no es la primera vez que surgen denuncias y acusaciones por la contaminación de ríos en la región, muchas preguntas siguen sin respuesta. ¿Qué ha ocurrido, qué hay en el agua? ¿A qué se debe esta contaminación? ¿Quiénes podrían ser los responsables?
En ese sentido, Marilyn García Paredes, directora de Verificación de Desempeño Ambiental del Ministerio de Ambiente, explicó que se trata de un problema de décadas, de mirar hacia otro lado. Y agregó que, si ahora se habla abiertamente del tema, es porque el ministro cuenta con el respaldo del Gobierno.
Hemos identificado que, en su mayoría, son actividades porcinas las que están generando una mayor carga contaminante en las fuentes hídricas, debido a que no cuentan con sistemas de tratamiento adecuados para las aguas residuales”, explicó.
También reveló que “hemos encontrado un tanque séptico y lo que también es el vertedero de Macaracas, que está generando lixiviados tanto en el río La Villa como en el Estibaná, los cuales finalmente descargan en el río La Villa”.
MiAmbiente se encuentra monitoreando el agua cruda de las fuentes hídricas de esta región. En ese contexto, la funcionaria indicó que actualmente los niveles de coliformes en el río Estibaná están muy por encima de los parámetros permisibles para aguas superficiales.
Se han encontrado coliformes fecales elevados, oxígeno disuelto en malas condiciones y vertidos de agua residual cruda en la fuente hídrica”, aseguró.
Explicó que, en el caso del río La Villa, a medida que se acerca a la toma de agua, los niveles de contaminación disminuyen. “Hemos determinado que el foco está en la cuenca media del río La Villa. Ahí se encuentran los puntos críticos de contaminación”, afirmó.
Ante la pregunta de cuántas porquerizas y tanques sépticos están involucrados, García Paredes respondió: “Hemos identificado una residencia, el vertedero y más de 10 actividades porcinas, de las cuales a una se le suspendió su operación”.
Sobre las medidas a aplicar, considerando que se trata de pequeños y medianos productores, señaló que “el ministro Juan Carlos Navarro, por instrucción del presidente de la República, José Raúl Mulino, nos ha pedido ser enérgicos, inflexibles y aplicar todo el peso de la ley. Actualmente, la normativa nos permite imponer sanciones de hasta 10 mil dólares”.
Agregó que los técnicos de MiAmbiente están recopilando todas las evidencias para presentarlas al equipo legal y evaluar hasta dónde más se puede llegar.
Anunció que, a partir de hoy y en los próximos días, se ordenarán suspensiones, notificando de forma inmediata a quienes hicieron caso omiso a las advertencias previas otorgadas en un plazo de 72 horas.
Actualmente, el Ministerio de Ambiente actúa como querellante ante el Ministerio Público, luego de presentar más de tres denuncias. Precisamente, este miércoles, la Fiscalía Regional de Los Santos realizó una inspección a dos empresas dedicadas a la cría de cerdos, ubicadas cerca del río Estibaná, como parte de una investigación en curso por posible contaminación del afluente.
Por su parte, el Ministerio de Salud anunció ayer que la calidad del agua en la potabilizadora de Los Santos y Herrera se encuentra en un 75%. Sin embargo, se emitió una nueva alerta para las comunidades de Macaracas y Llano de Piedra, la cual se mantiene activa, según García Paredes.
La funcionaria indicó que continuarán con las suspensiones de actividades que estén contaminando los afluentes en la región de Azuero y no descartan iniciar investigaciones en fuentes hídricas de otras provincias.
La contaminación del río Estibaná ha generado una crisis hídrica que afecta a miles de residentes en Los Santos, quienes dependen de este afluente para el abastecimiento de agua potable. El Instituto de Acueductos y Alcantarillados Nacionales (Idaan) ha tenido que implementar planes de contingencia para suministrar agua mediante camiones cisterna, mientras se restablecen los niveles de potabilidad.
Los residentes exigen respuestas urgentes y sanciones ejemplares para los responsables de la contaminación, al tiempo que instan al Gobierno a reforzar los controles sobre las actividades que impactan los recursos hídricos de la región.