Vence plazo de salvoconducto otorgado a Martinelli. Nicaragua no autorizó su entrada al país
Martinelli se mantendrá en la embajada donde ha estado atrincherado por 1 año y 2 meses, alegando ser un perseguido político y evadiendo el cumplimiento de la condena que pesa sobre sus hombros de 10 años y 8 meses por blanqueo de capitales en el caso New Business.
La medianoche de este 4 de abril culminó el plazo otorgado por el gobierno panameño para que el expresidente Ricardo Martinelli hiciera uso del salvoconducto concedido para viajar a Nicaragua, país que consintió un asilo político a su favor el 7 de febrero del 2024.
Sin embargo, cumplido el término, el exmandatario no pudo concretar su salida de Panamá debido a la negativa del gobierno de Daniel Ortega de recibirlo, alegando que existía una especie de ‘emboscada’, esto luego de que se conociera que existía una solicitud de alerta roja contra Martinelli.
La Cancillería informó esta noche, a pocos minutos de las 12:00 a.m. que: "Como consecuencia de la falta de respuesta, a pesar de que se envió por canales formales toda la documentación solicitada por el Gobierno de la República de Nicaragua, el salvoconducto ha llegado a su término de vencimiento".
Agrega que esta situación no afecta el reconocimiento del asilo diplomático que le ha sido concedido al expresidente de la República de Panamá, Ricardo Alberto Martinelli Berrocal, hecho que permanece en vigor y es respetado por nuestra parte, en cumplimiento de los deberes internacionales y de respeto a los derechos humanos.
Alma Cortés, quien forma parte del equipo de defensa del exmandatario Martinelli, y quien se encontraba en la Embajada de Nicaragua en Panamá, dijo que ahora se encuentran a la espera de lo que pueda ocurrir en los próximos días, ya que es un tema que está en las manos de las cancillerías de Panamá y Nicaragua. Asimismo, dijo que seguirán mediando para lograr tener otra oportunidad.
Cortés adelantó que están haciendo un análisis sobre la solicitud de alerta roja de Interpol, la cual calificó de improcedente, asegurando que fue lo que retrasó el proceso de salida del expresidente.
Descartó la posibilidad de que alguna comisión de parte de Martinelli viaje a Nicaragua para abordar el tema y, en su lugar, dijo que es algo que se está tratando con la embajadora de Nicaragua en Panamá y ahora solo queda esperar a ver qué pasa a partir de este 4 de abril.
¿Por qué se detuvo el viaje?
El pasado lunes, la vicepresidenta Rosario Murillo expresó: “No comprendemos por qué las autoridades panameñas han otorgado salvoconducto y casi inmediatamente han emitido una solicitud de alerta roja por acciones criminales a Interpol. Esta conducta contradictoria pareciera una trampa legal que pretende complicidades y deslealtades”.
En la misma comunicación hecha el pasado lunes 31 de marzo (primer plazo otorgado a Martinelli), Murillo también dijo que "no podemos, como autoridades de un Estado responsable y humanista, aceptar lo que consideramos una emboscada, tanto al ciudadano expresidente, en condición de asilo y refugio en nuestra sede diplomática, quien estaría expuesto a acciones agresivas, como al mismo Gobierno de Nicaragua, a quien se pretende generar un conflicto internacional que ni nos interesa, ni nos incumbe, ni nos pertenece".
Dada la situación, el gobierno panameño emitió un comunicado aclarando que dicha solicitud de alerta de Interpol no era impedimento para que el expresidente viajara en calidad de asilado a Nicaragua. Además, se emitió un segundo comunicado en que se afirmaba que la solicitud había sido rechazada.
También, al vencerse el plazo otorgado en primera instancia el 31 de marzo, la Cancillería emitió una nueva comunicación en la que informó sobre la extensión del salvoconducto por 72 horas más, mientras que se recibía una nueva misiva de Nicaragua, misma que hasta las 11:59 p.m. del 3 de abril no llegó.
En tanto, el viaje a Nicaragua se frustró, por lo que Martinelli se mantendrá en la embajada donde ha estado atrincherado por 1 año y 2 meses alegando ser un perseguido político y evadiendo el cumplimiento de la condena que pesa sobre sus hombros de 10 años y 8 meses por blanqueo de capitales en el caso New Business, investigación que se desprende de la compra del grupo editorial Epasa (Panamá América, y Crítica).
Por su parte, el presidente de la República, José Raúl Mulino, en la conferencia de prensa de este jueves, al ser cuestionado sobre la situación de Martinelli en caso de que Nicaragua no acreditara su ingreso al país, dijo:
“¿De qué depende? Yo no sé, no lo sé. Así que, como he dicho, en materia de política exterior, yo no especulo. Vamos a esperar el plazo dado y, de lo contrario, actuaré en concordancia (…)”. “Eso es todo lo que se le ha pedido y se le ha dado”.
Aseguró que la única obligación del Gobierno panameño es: “Transportar a Martinelli al lugar de salida, debidamente protegido, garantizándole su seguridad (…)”.