Sector construcción a la expectativa por la discusión del proyecto de ley sobre interés preferencial
El programa de interés preferencial ha sido un motor de la economía en tiempos recientes, generando miles de empleos directos e indirectos, y su eventual extinción sin una extensión de la ley podría tener consecuencias negativas para la industria.
Ciudad de Panamá, Panamá/La falta de avance en el proyecto de ley que reforma la Caja de Seguro Social (CSS) ha tenido repercusiones más allá de lo previsto. Según diversos actores de la industria de la construcción, la incertidumbre generada por el estancamiento de esta legislación ha paralizado importantes proyectos de vivienda, especialmente aquellos vinculados al programa de interés preferencial, el cual sigue siendo una pieza clave para la reactivación del sector.
Juan Arias, presidente de la Cámara de Comercio, afirmó que la situación es grave y afecta no solo a la CSS, sino a un amplio espectro de iniciativas que dependen de un marco financiero claro.
"Recientemente se menciona que hay 75 proyectos paralizados, pero en realidad son muchos más. Esos 75 proyectos ya estaban listos para arrancar; solo esperaban la temporada de verano. El proyecto de la CSS no solo impacta la seguridad social, sino que está frenando el progreso en varios sectores", señaló Arias, quien destacó la magnitud del problema y la necesidad urgente de una solución.
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El impacto en la construcción de viviendas
Uno de los sectores más golpeados es el de la construcción de viviendas, especialmente las dirigidas a sectores de clase media y baja, que dependen de los beneficios del programa de interés preferencial. Este programa permite a los compradores acceder a tasas de financiamiento más bajas para la adquisición de viviendas, pero su vigencia está en juego.
Según Alejandro Ferrer, presidente de la Cámara Panameña de la Construcción (CAPAC), la paralización de estos proyectos está afectando tanto a los inversionistas como a los miles de trabajadores que dependen del desarrollo de proyectos inmobiliarios.
Ferrer explicó que la Ley de Interés Preferencial, que está vigente hasta agosto de 2025 para permisos de ocupación y hasta diciembre de 2025 para desembolsos, está siendo un tema central de discusión.
"La intención es que se haga una reforma que mantenga el techo de $120,000 para la vivienda y, a la vez, se extienda el período para que los inversionistas tengan la certeza de que los incentivos estarán vigentes el tiempo necesario para desarrollar sus proyectos", indicó Ferrer.
Un recurso necesario para la reactivación del sector
Tanto Arias como Ferrer coincidieron en que la aprobación de una ley que garantice los incentivos para la construcción es crucial para la reactivación del sector. El programa de interés preferencial ha sido un motor de la economía en tiempos recientes, generando miles de empleos directos e indirectos, y su eventual extinción sin una extensión de la ley podría tener consecuencias negativas para la industria.
Ante esta situación, ambos gremios han hecho un llamado a las autoridades para que se dé prioridad al debate de la ley y se garantice su aprobación antes de que venza el plazo actual. Los proyectos de vivienda en espera, que podrían generar miles de empleos y mejorar las condiciones de vida de muchas familias, están a la espera de un marco legal que brinde la estabilidad financiera necesaria para su ejecución.
La Cámara Panameña de la Construcción y la Cámara de Comercio han reiterado que, sin una ley clara y extendida de interés preferencial, muchos proyectos seguirán en pausa, lo que afectará tanto al sector de la construcción como a la economía nacional en su conjunto.
Con información de Elizabeth González