Balbino Fuenmayor busca seguir ascendiendo en los Reales
Reales de Kansas City - MLB
Lo primero que llama la atención del prospecto de los Reales, Balbino Fuenmayor, es su apodo.
"El Gran Balbino" es el del venezolano, quien ha resucitado su carrera.
"Sé que en los Estados Unidos a todo el mundo le gusta mi nombre, porque es tan parecido a 'Bambino'", dijo Fuenmayor. "Estoy contento por eso y que me digan 'El Gran Balbino'".
El nombre de Balbino es una tradición familiar.
"Mi bisabuelo se llamaba Balbino, al igual que mi abuelo y mi padre", dijo Fuenmayor. "Mi hija tiene tres años y se llama Camila. Pero si tengo un varón se llamará Balbino".
Pese a su nombre, Fuenmayor estuvo cerca de quedar fuera del béisbol. Considerado un prospecto de lujo en los Azulejos en el 2006, Fuenmayor se vio limitado a los niveles más bajos de liga menor durante siete temporadas, en las que jamás pasó de Clase-A.
Fuenmayor exhibió algo de poder, pero él mismo reconoce que no tenía mucha disciplina en el plato. En un período de dos campañas, se ponchó 242 veces en Clase-A de los Azulejos. En el 2013, Toronto perdió la paciencia y lo dejó en libertad.
Ahora con 26 años de edad, Fuenmayor quedó deprimido en ese momento al ver que aparentemente se había esfumado su sueño de jugar en Grandes Ligas.
"Cuando me dieron release, estaba bien frustrado", dijo.
Fuenmayor volvió a Venezuela y habló largo y tendido con su familia.
"Cuando (me dejaron en libertad), me familia me brindó apoyo y me dijo que yo debía luchar por otra oportunidad", relató el toletero. "Entonces, decidí seguir con mi sueño de jugar en Grandes Ligas.
"Empecé a jugar otra vez en Venezuela (con Caribes) y cambié mi mentalidad. Dejé de pensar que cada turno debía ser un jonrón de 500 pies. Comencé a pensar en poner la bola en juego".
Sin provocar interés alguno de equipos de Grandes Ligas, Fuenmayor decidió que el camino de regreso debía ser a través de las ligas independientes. Luego de algo de éxitos en ligas de discreto nivel en el 2013, el valenciano firmó con Quebec de la Liga Independiente Canadiense-Estadounidense en el 2014.
Dicha experiencia cambió su carrera. Fuenmayor quemó el circuito con promedio de .347, 23 jonrones y 99 empujadas. Los Reales vieron esos números y decidieron darle un pacto de liga menor.
"Lo colocamos en Doble-A (Northwest Arkansas) el año pasado sin saber si él podía manejar eso", dijo el gerente general asistente de Kansas City, Scott Sharp.
Fuenmayor brilló en la liga, bateando. 354 con 15 cuadrangulares y 51 impulsadas en 73 encuentros. Con dicha actuación se ganó un ascenso a Triple-A Omaha, donde tuvo promedio de .377 en 16 juegos. Fue convocado al Juego de las Futuras Estrellas a mediados del año.
Sin embargo, terminó la temporada de Fuenmayor a finales de julio cuando sufrió una lesión en la rodilla izquierdo. Pero los Reales lo volvieron a firmar.
Fuenmayor aprobó su examen médico hace dos semanas y Kansas City lo premió con una invitación a sus primeros entrenamientos de Grandes Ligas.
"Me perdí siete meses debido a la lesión", dijo Fuenmayor. "Pero ahora estoy entusiasmado de volver a jugar. Estoy bien contento".