Otra jornada de errores para los arqueros

Esta Copa Mundial está teniendo un patrón que salta a la vista: fallos costosos de los arqueros. El lunes, otro par de goles tuvieron como característica alguna pifia de un guardameta, las cuales se suman a las del inglés Robert Green y el argelino Fawzi Chaouchi. Justo Villar de Paraguay no supo despejar un córner y la pelota quedó servida para que Daniele De Rossi estableciera el empate 1-1 que evitó un fiasco del campeón vigente en su debut. Dinamarca le estaba haciendo pasar muchas dificultades a Holanda, pero Thomas Sorensen salió a cortar un balón largo y la jugada acabó con un autogol de Daniel Agger que encaminó a la "Oranje" a un triunfo 2-0. Japón finalmente ganó un partido fuera de sus fronteras, un 1-0 sobre un Camerún que decepcionó en todos los sentidos, pero varios aspectos ajenos a la acción en las canchas se entrometieron en la discusión de la cuarta jornada del Mundial de Sudáfrica. En un episodio rarísimo en los mundiales, la policía debió encargarse de la seguridad en las sedes de Ciudad del Cabo y Durban por culpa de una disputa salarial entre los guardias y la empresa que los contrata. La medida se tomó luego que la madrugada del lunes, tras el partido que Alemania le ganó 4-0 a Australia, la policía lanzó gases lacrimógenos y balas de goma para dispersar a personal de seguridad que se resistía irse del estadio Moses Mabhida. ¿Y qué decir de las vuvuzelas? El resto del mundo que ve el torneo por la televisión no soporta el zumbido de las cornetas de plástico, pero tanto la FIFA como los organizadores se hacen de oídos sordos. El presidente de la FIFA Joseph Blatter salió a defender la tradición sudafricana: "¿Querrían ver una prohibición de las tradiciones de su país?", fue el mensaje colgado por Blatter en su cuenta de Twitter. Para Paraguay, su empate bajo la lluvia en Ciudad del Cabo no fue un mal negocio al debutar contra los campeones, pero los dirigidos por Gerardo Martino se fueron con un sabor agridulce al dejar escapar la victoria con un error caro. Antolín Alcaraz adelantó a Paraguay a los 39 minutos con un cabezazo tras un tiro libre de Aureliano Torres. La "Albirroja" parecía se llevaba los tres puntos hasta que llegó el tanto de De Rossi a los 63, cuando Villar manoteó el aire a un tiro de esquina. El partido también tuvo la nota sorpresiva del cambio de arqueros en Italia al inicio del segundo tiempo: Federico Marchetti entró por Gianluigi Buffon, de quien el técnico Marcello Lippi explicó que se había quejado de una dolencia en la espalda. Italia y Paraguay quedaron con un punto dentro del Grupo F, cuya primera jornada se completará el martes con el choque entre Nueva Zelanda y Eslovaquia en Rustenberg. Con el empate de Paraguay, la tendencia para las selecciones latinoamericanas en el Mundial sigue siendo positiva. Argentina debutó con victoria, mientras que México y Uruguay igualaron ante el país anfitrión y Francia. Falta el estreno de Brasil, que se concretará el martes al vérselas con Corea del Norte en Johannesburgo, además del choque Chile-Honduras el miércoles en Nelspruit. Los países asiáticos también andan bien. Japón se sumó a Corea del Sur en la columna de victoriosos. Keisuke Honda marcó el gol nipón a los 39 en Bloemfontein. Japón quedó al frente del Grupo E junto con Holanda, uno de los candidatos al título que no estuvo a la altura de sus credenciales. La victoria holandesa en el Soccer City se fraguó con el autogol de Agger apenas comenzado el segundo tiempo. Dirk Kuyt (85) anotó el segundo. Ya van 11 partidos en el torneo y hay algo que brilla por su ausencia: el gol de tiro libre. ¿Se podrá ver el martes? Aparte del Brasil-Corea del Norte y el Nueva Zelanda-Eslovaquia, esa clase de factura podría aparecer en el otro choque, Costa de Marfil-Portugal. Después de todo, ahí estará un especialista, el luso Cristiano Ronaldo.