Dibaba impone nuevo récord mundial en los 1,500 metros

Liga Diamante/Genzebe detuvo el crono en 3’50”07 y acabó en Mónaco con el viejo récord de la china Qu Yunxia, que databa de 1993.

La etíope Genzebe Dibaba, premio Laureus a la mejor deportista en 2014, escribió este viernes, a falta de lo que ocurra en el Mundial de Pekín, la página por excelencia del atletismo en 2015. Genzebe, hermana de la también estelar Tirunesh Dibaba, firmó en Mónaco, en el mejor meeting hasta ahora de la Diamond League 2015, un nuevo récord mundial de 1.500 metros, uno de los más antiguos y caros del programa olímpico. Con un tiempo de 3’50”07, borró de las listas el tope de la china Yunxia Qu, una de las discípulas del grupo del técnico Ma Junren, sospechoso de prácticas de dopaje.

La grandeza de la gesta de Dibaba se entiende al echar un vistazo a la fecha del anterior récord: 1993. Hacía nada menos que 22 años que Yunxia Qu sostenía un récord (3’50”46) desprestigiado por los métodos de Junren y su ‘ejército’ de sufridas atletas, de las que años después trascendieron noticias de castigos físicos, extrañas pócimas y controles discutibles. Cayó el récord de 1.500, como hace unos años el de 5.000 a cargo de su hermana Tirunesh, pero una pupila de Junren, Wang Junxia, mantiene aún el de 10.000 desde 1993.

Dibaba, doble campeona mundial en pista cubierta, había fracasado los últimos años en las grandes citas al aire libre, una deuda incomprensible en una mujer que el año pasado fue capaz de batir tres récords indoor en escasos días. Invicta en 2015, la pequeña de las hermanas Dibaba, triunfadora hace unos días en el meeting de Barcelona, aprovechó la presión de la holandesa-etíope Sifan Hassan, campeona de Europa, con la que se quedó sola a 700 metros de meta. A Hassan la soltó justo antes de la última vuelta, un 400 de vértigo que Dibaba firmó en 60 segundos exactos.

El récord masculino de 1.500 también peligró en el estadio Luis II. El keniano Asbel Kiprop rozó la plusmarca de El Guerrouj (3’26”00) con un tiempo de 3’26”69, quinta mejor marca de todos los tiempos, que le coloca tercero en el ranking’all time’ tras el propio El Guerrouj y Bernard Lagat. Fue el mejor 1.500 masculino en 14 años, y quizás el mejor 1.500 ‘global’ de todos los tiempos, con hasta seis hombres por debajo de 3’30”, entre ellos Mo Farah.

Pero hubo más en Mónaco: un Gatlin intocable de nuevo en el 100 (9”78), inaccesible para Tyson Gay (9”97); el inesperado bosnio Amel Tuka firmando el mejor 800 del año (1’42”51), y la rusa Kuchina (2,00) negando la victoria en la altura a una Ruth Beitia de nuevo a gran nivel (2ª, 1,97 m.).