Inglaterra sale humillada del voto de sedes mundialistas
Pese a que Inglaterra se abocó a una campaña en la que no escatimó en recursos y recurrió a su realeza, el empeño por conseguir la sede de la Copa Mundial de 2018 terminó en una humillante derrota para el país que se enorgullece por ser la cuna del fútbol. En la víspera del voto del jueves en Zurich, el príncipe Guillermo, el primer ministro David Cameron y David Beckham gestionaban votos en forma incansable. Pero Inglaterra sólo recibió dos y fue eliminada a las primeras de cambio de la votación. Y uno de esos votos, tras gastarse 15 millones de libras (23 millones de dólares) durante dos años de campaña, fue de Geoff Thompson, el único miembro inglés del comité ejecutivo de la FIFA. "No puedo creer lo que ha ocurrido", dijo Thompson, a la vez el director de la campaña. "No se cumplieron las promesas de voto. Nunca me imaginé que seríamos eliminados en la primera vuelta". De todas las candiduras, la inglesa fue la más visible. Beckham fue a todas partes, además de hacer promosas de invertir en el desarrollo del fútbol en todo el mundo. Pero la sede fue para Rusia, que ganó en la segunda ronda sobre las candidaturas conjuntas de España-Portugal y Holanda-Bélgica. Andy Anson, coordinador de la campaña, advirtió que el país ha quedado muy aislado en el deporte que concibió. "Geoff Thompson se empeñó bastante por nosotros, pero está sólo en la FIFA sin realmente estar integrado", dijo Anson "Si queremos esos torneos, tenemos que integrarnos más en esas organizaciones. Tenemos la liga más fuerte del mundo y estamos bien fuertes a nivel local y por ellos no vemos la necesidad de hacerlo".