¿Por qué a otros no y a Panamá sí?

En los registros que tiene internet, cuando buscas países que han sido sancionados por la Federación Internacional de Fútbol Aficionado (FIFA), la búsqueda arroja resultados de jugadores específicos y algunos países que se prestan para intervenciones políticas y faltas que en verdad son graves. Pero, la pregunta del millón es: ¿Por qué a Panamá se le sanciona por faltas no tan graves que rayan en lo absurdo? o ¿Será que hay algo en contra de la selección de Panamá que en los últimos años viene haciendo sus “pininos” en este deporte?

Hace algunos días ningún fanático que sigue a la Sele y ama esas seis letras nunca se imaginó que la Federación Panameña de Fútbol (Fepafut) tendría que pagar 8 mil dólares por unos “papelitos” que se tornaron en el pan de la discordia, cuando en octubre del 2012 Panamá se medía ante Honduras. Ahora la situación es otra; no hablamos de papelitos, ahora se trata de “objetos tirados al campo de juego”, según la FIFA.

La nueva sanción son 18 mil dólares porque la afición tiró objetos a la cancha al final del juego de la primera fecha en la hexagonal final ante Costa Rica.

Lo que le llama la atención a los cronistas deportivos panameños, que han conversado con Somoslasele.com, es el hecho de que muchos países del área han agredido a la fanaticada panameña cuando van a sus estadios y nadie dice nada.

Para refrescar un poco la memoria, en El Salvador hasta huevos le arrojaron a la prensa criolla en el estadio “cuscatleco”. Eso pasó en la eliminatoria rumbo a Alemania 2006.

También, en la era de “Cheché” Hernández, costa Rica fue vetada por agredir a la selección de México en eliminatorias mundialistas. Hablamos de años atrás, pero parece que ahora las medidas se han fortalecido. ¿O será que solo se aplica con Panamá?

Uno de los aspectos que más llama la atención es que Panamá, por decir algo, es uno de los países que viene creciendo con mayor auge en este deporte. ¿Será que se le quiere poner freno? Para bien o para mal, una selección no es nada sin su público, y al momento que un gol llega a la portería contraria, hasta los monjes tibetanos se contagian con la emoción; o sea, son humanos, igual que cualquier panameño.

Advertencias, advertencias y más advertencias, eso es lo único que le ha prometido FIFA a Panamá para el partido del martes ante Honduras en el estadio Rommel Fernández. De pasar nuevamente el incidente de la tiradera de cosas, el partido ante México (7 de junio) será a puerta cerrada.