Y siempre tenían que ser los mexicanitos
Ayer la prensa panameña no puedo tener acceso a los entrenamientos de la Sub-17 de México porque fueron echados del "Cascarita" Tapia.
¡Mexicanitos tenían que ser! Esa era la frase célebre de uno de los mejores programas de humor venezolano; que por cierto en Panamá no se volvió a ver. Bueno, ese no es el tema, el tema está en que como buenos periodistas; seguidores y amantes del fútbol nacional e internacional, el “Staff” de somoslasele.com iba para el entrenamiento de México Sub-17, pero el jefe de prensa de este onceno no permitió que se diera una cobertura como se debe en el estadio Luis Ernesto “Cascarita” Tapia.
Al fin y al cabo, el equipo periodístico tuvo que abandonar las instalaciones que en su nombre no tiene ni a Cuauhtémoc Blanco ni a Hugo Sánchez; hablamos de un estadio ubicado en la ciudad capital, provincia de Panamá, país de Panamá. Me gustaría saber ¿qué pasa si la selección panameña va a México con el mismo ímpetu y prepotencia que ostentan estos aztecas? La respuesta es muy obvia, nos sacan a patadas, nos mientan la madre y sepa Dios que otras cosas. Pero bueno, tranquilos, Panamá es el país de las maravillas donde los extranjeros vienen y hacen lo que quieren en el aspecto turístico, empresarial y ahora deportivo.
Que triste es saber que a profesionales de la pluma de un país, que todavía hace sus pininos en el campo del fútbol, sean tratados como extranjeros en su propia tierra, por personas que solo vienen de paso. Esta y muchas interrogantes más están en el tapete para los encargados de organizar torneos como el Premundial Sub-17. Algo sí es cierto, no se trata de cualquier equipo, son los actuales campeones mundiales de esta categoría, pero creo que más que ayudar a los chicos, lo que hacen es inflar esos egos juveniles para cuando crezcan un poquito más ni siquiera quiera pisar el suelo.
Que humildes fueron los jugadores de Jamaica y Trinidad Tobago cuando llegaron al aeropuerto de Tocumen. Eran personas comunes y corrientes que incluso, los mismos técnicos, accedieron a darle paso a la prensa para que hiciera las preguntas pertinentes. ¿Será que la fama ciega las mentes? Ojalá esa misma fama que los lleva a sacar a periodistas sin permitirles hacer el trabajo por el cual les pagan y subsisten sus familias, no le pase como lo que le está pasando a la mayor de México que tienen y tienen y tienen y para la bajada no pasan de empates; que más huelen a derrota que a dos puntos regalados.
Señores, hablamos de un Premundial Sub-17, no de una Copa del Mundo. Por favor, no pongan en riesgo el ego de estos niños que apenas saben lo que es un balón de fútbol.