El Girona de la mano de Bárcenas, recuperan la sonrisa en LaLiga SmartBank

El Girona, obligado a hallar la regularidad para optar a pelear por el ascenso, recuperó la sonrisa y la confianza al reencontrarse con la victoria con un sufrido triunfo ante el Mirandés en Montilivi, con un solitario gol de Mamadou Sylla.

El equipo de Francisco Rodríguez, que solo había sumado seis de los últimos 21 puntos posibles, se sitúa a cuatro puntos del Málaga y de las posiciones de 'playoff' de ascenso, mientras que el Mirandés, que mereció el empate, y quizás más, en la segunda parte, puso fin a una racha de tres encuentros seguidos sin conocer la derrota, pero se mantiene en la zona tranquila de la tabla.

El Girona, incomodado por un Mirandés tan joven como valiente, fue incapaz de imponer su superioridad en los primeros compases.

El cuadro local, obligado a reaccionar tras las dos desilusionantes e inesperadas derrotas encajadas ante el Málaga (0-1) y el Alcorcón (1-0) despertó alrededor de la media hora. Primero inquietó a Raúl Lizoain con un remate de cabeza desde el vértice del área pequeña del colombiano Bernardo Espinosa que se fue muy cerca del palo izquierdo del meta visitante, y, poco después, Sylla, asistido por Yoel Bárcenas, anotó el 1 a 0 con un derechazo desde el balcón del área, ajustado al palo contrario e inalcanzable para el arquero.

El panameño Édgar Yoel Bárcenas, jugó 74 minutos en este choque.

El tanto del potente delantero hispano-senegalés, autor de cinco de los 11 goles del Girona, allanó el camino hacia la victoria de los catalanes, que apenas habían sumado un punto en sus últimos tres partidosen Montilivi.

José Alberto López Menéndez trató de devolverle el pulso al Mirandés en el entretiempo, dando entrada a Víctor Meseguer, Sergio Moreno y Javi Jiménez, y el conjunto de Anduva dio un paso firme hacia adelante, hacia la portería de Juan Carlos Martín.

En el minuto 57, el cancerbero castellanomanchego repelió de forma providencial un peligroso disparo de Sergio Moreno para evitar que el Mirandés consiguiera la igualada en su primera ocasión clara del encuentro.

Con la intención de asegurar un triunfo muy importante en clave local, Francisco retiró a Stuani, todavía en rodaje, para fortificar el centro del campo con la entrada del también uruguayo Sebastián Cristóforo y, más tarde, hizo entrar a Jonás Ramalho para dibujar un 5-3-2 para alejar al Mirandés del arco de Juan Carlos, que, omnipresente, volvió a dejar su portería a cero seis partidos después.