Eurocámara inicia la investigación de VW
La comisión especial de la Eurocámara para investigar el escándalo de las emisiones de Volkswagen (VW) inició el jueves su andadura con el nombramiento de sus 45 miembros, dos de ellos españoles, que trabajarán en el caso durante un año para esclarecer el caso.
El pleno del Parlamento Europeo (PE) votó el jueves la lista de los miembros de esta comisión, en la que figuran dos eurodiputados españoles, Pablo Zalba (PP) y José Blanco (PSOE), y que contará como suplentes con Pilar Ayuso y Antonio López-Istúriz (PP), Sergio Gutiérrez (PSOE), Paloma López Bermejo (IU) y Francesc Gambús (UDC).
En declaraciones a Efe, Zalba subrayó la necesidad de "no caer en el sensacionalismo" ya que eso podría perjudicar a la industria del automóvil, en la que España es segunda potencia europea, y llamó al "pragmatismo".
"No podemos prejuzgar y tenemos que tener un rigor máximo, el principal objetivo tiene que ser conocer toda la verdad sobre el asunto", añadió el vicepresidente de la Comisión de Asuntos Económicos y Monetarios.
El socialista José Blanco también defendió la necesidad de trabajar "con cautela" para evitar dañar a la industria del automóvil española y lamentó que este escándalo haya creado "una gran incertidumbre en el sector".
Sin embargo, incidió en que esta comisión debe estar orientada a saber "por qué Volkswagen cometió el fraude" y "si los controles fallaron".
"Es esencial saber si se vulneraron las normas intencionadamente, si fallaron los mecanismos de control y si la legislación vigente es suficiente, ya que esto genera preocupación por parte de los consumidores", añadió a Efe el miembro de la Comisión de Industria de la Eurocámara.
Desde Izquierda Unida, Paloma González Bermejo esperó que el trabajo vaya más allá de "informes técnicos que eluden responsabilidad política".
La creación de esta comisión especial es una iniciativa impulsada por los Verdes que logró el respaldo de la Eurocámara en la pasada sesión plenaria.
Está previsto que el trabajo arranque en febrero y que a los seis meses publique un informe preliminar con las conclusiones extraídas de la investigación.
Un trabajo que llega en pleno debate por la propuesta de la Comisión Europea (CE) y el Consejo sobre los límites de emisiones, que los defensores del medioambiente consideran demasiado laxa.
Está previsto que la Eurocámara vote una objeción a esta propuesta en la próxima sesión plenaria de Estrasburgo, la primera semana de febrero, un voto que fue aplazado con el apoyo de los grupos mayoritarios, que buscaron así dar margen a la CE para presentar un nuevo texto.
Las medidas planteadas por el Ejecutivo comunitario, que plantea que los coches puedan sobrepasar en carretera un 110 % los límites de emisiones sin que se considere una infracción, han sido recibidas de forma desigual en el hemiciclo.
"Es una propuesta razonable y equilibrada para garantizar la supervivencia de la industria y que va más allá de los estándares actuales", defendió Zalba.
Por su parte, López Bermejo consideró que estas medidas "no tienen en cuenta el interés de los ciudadanos ni del medio ambiente" y que "se escudan en la defensa del empleo para proteger a la industria", pero espera que la comisión especial "sirva para que los ciudadanos conozcan lo que está sucediendo y lo mucho que influyen algunos sectores en la legislación".
Precisamente hoy en Bruselas, el comisario europeo de Acción por el Clima y Energía, Miguel Arias Cañete, se reúne con representantes de los Fabricantes Europeos de Automóviles (ACEA), que han pedido aclaraciones sobre cómo el nuevo sistema de pruebas reales en carretera que plantea el Ejecutivo comunitario va a afectar a la industria.