Noticiero A.M.
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El jefe de Gabinete argentino, Marcos Peña, hizo hincapié este miércoles 14 de diciembre, en la "vocación" de su Gobierno de "buscar un acuerdo" con la oposición, los gobernadores y los sindicatos por el impuesto que pesa sobre el salario de los trabajadores, después de que se frenara su debate en el Senado.
"El presidente (Mauricio Macri) nos planteó la necesidad de convocar a los distintos sectores involucrados en esta discusión del impuesto a las ganancias a buscar un acuerdo, a buscar una solución en el marco de la responsabilidad, de la seriedad", dijo Peña en una rueda de prensa realizada en la Casa Rosada, sede del Ejecutivo, junto al ministro del Interior, Rogelio Frigerio.
La comparecencia se produjo después de que ambos funcionarios y otros miembros del Gabinete se reunieran con Macri para analizar la forma en la que poner en marcha un proceso de diálogo con distintas instancias políticas y sociales sobre el denominado impuesto a las ganancias, que grava los sueldos medios y altos del país.
La semana pasada, la Cámara de Diputados dio media sanción a un proyecto de reforma de dicho gravamen consensuado por las distintas fuerzas de la oposición que se impuso al que presentó el oficialismo, sin mayoría en la cámara, en el que el aumento de la base imponible era menor.
Ayer, antes de que comenzara el debate en el Senado sobre la iniciativa, el Gobierno salió a presionar y advirtió que el costo fiscal, en el caso de aprobarse, sería inasumible para los gobernadores de algunas provincias, y obligaría a reformar el presupuesto y a limitar las obras públicas.
Finalmente, entre el Gobierno y la oposición se acordó que el Ejecutivo estudiaría una propuesta de diálogo.
Este miércoles, Peña anunció que ya comenzaron las conversaciones con los miembros del Senado y con la Confederación General del Trabajo (CGT), con la que se reunirá mañana oficialmente.
En ese sentido, insistió en que aunque la prioridad es resolver este conflicto "lo más rápido posible", lo "más importante" es la "vocación" de buscar un acuerdo sin poner una "fecha límite" para no "llegar a un error de resultado como la semana pasada" en el Congreso.
En su opinión, el Gobierno cuenta con la "gran ventaja" de tener referencias oficiales para iniciar el debate, "a diferencia de hace un año, que el Estado mentía oficialmente en todos los indicadores estadísticos y en todas las miradas que tenía", algo que "empobrece" las discusiones.
Por su parte, Peña recordó que el presupuesto aprobado en el Congreso para el próximo año fija el límite del costo fiscal de la reforma del impuesto en 30.000 millones de pesos (unos 1.800 millones de dólares).
En ese sentido, el ministro del Interior afirmó que este martes los gobernadores mostraron su preocupación sobre el posible aumento de esta cifra si se aprueba un proyecto como el de la oposición, que fija en 33.500 pesos (unos 2.070 dólares) frente a los 18.800 actuales (unos 1.160 dólares) el monto mínimo de salario mensual a partir del cual se aplica el impuesto a los solteros.
Para los casados, el límite aumentaría desde 30.000 pesos (unos 1.850 dólares) a 44.000 pesos (unos 2.700 dólares).
"Lo que tenemos que debatir son fuentes alternativas de financiamiento" si se busca continuar en esta línea.
Por su parte, Peña insistió en que no considera que el proyecto aprobado "sume ni que sea sustentable" pero celebró este espíritu de querer "parar la pelota", ya que supone "una enorme oportunidad" de entender que no existe "el realismo mágico de decir que solamente con una expresión de voluntad se solucionan todos los problemas".
Este martes, el fiscal federal Guillermo Marijuán pidió investigar a Macri, al ministro de Hacienda y Finanzas Públicas, Alfonso Prat-Gay, y al mismo Peña por la firma de un decreto que incluye a los familiares de funcionarios públicos en una ley de blanqueo de capitales que ya fue aprobada en el Congreso al considerar que pudo haber abuso de autoridad.
Sobre este asunto, el jefe de Gabinete defendió hoy que esta medida da la "oportunidad" a Argentina de "ensanchar" su base tributaria y salir de un "esquema de alta evasión" que se generó durante el Gobierno anterior "único en el mundo por su dimensión".
"Cuantos más activos tributen, es mejor" para el país, aseguró antes de destacar que la ampliación del "sinceramiento fiscal" no altera "el espíritu de la ley".