Vicepresidente de EEUU afirma en Florida que 'reconstruirán' Puerto Rico
El vicepresidente de EE.UU., Mike Pence, prometió en una iglesia en el centro de Florida que el Gobierno de este país "reconstruirá" Puerto Rico y que no se detendrán hasta que "el trabajo esté terminado".
"Puerto Rico volverá y, como dice el presidente (Donald Trump), mejor que antes", manifestó hoy el vicepresidente durante un discurso que ofreció a unas 300 personas en la Iglesia de Dios, en la ciudad de Kissimmee, al sur de Orlando, templo al que llamó "el corazón de la comunidad puertorriqueña en Florida"
Previo a su viaje a Puerto Rico, donde este viernes verá de primera mano la devastación causada por el huracán María, en una visita que se realizará tres días después de la que efectuó el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, Pence dijo que la actual Administración hace todo lo posible para ayudar en la recuperación de la isla.
El viaje de Pence al centro de Florida, donde se asienta una de las comunidades de puertorriqueños más numerosas en EE.UU., se produce poco después de las críticas que recibió el presidente Trump tras la visita de cinco horas que efectuó a la isla el pasado martes y los comentarios que hizo vía Twitter, en especial contra la alcaldesa de San Juan, Carmen Yulín Cruz.
Desde que el huracán golpeó Puerto Rico el 20 de septiembre, la iglesia ha funcionado como un centro de donaciones para los damnificados por el paso del ciclón, que dejó sin energía a casi la totalidad de la población.
El vicepresidente, que estuvo acompañado por los senadores Marco Rubio y Bill Nelson, resaltó que los esfuerzos de la iglesia han permitido que se llenen 15 camiones con alimentos y artículos de primera necesidad, además de unos 150 generadores de electricidad, que serán enviados para la isla.
Pence destacó además los esfuerzos hechos desde diferentes agencias federales que han permitido el envío de 11,5 millones de comidas y 8 millones de litros de agua, además de la disposición de "más de 15.000 dedicados funcionarios federales" en el terreno y 14 embarcaciones de la Marina y la Guardia Costera estadounidense.
Resaltó los progresos que se han registrado en la isla, donde ya funcionan unos 50 hospitales y centros de diálisis y el 75 por ciento de los puertos operativos, e igual porcentaje de estaciones de servicio.
"La verdad es que el huracán María fue una tormenta extraordinaria que produjo un daño extraordinario, y será un largo camino de regreso. Pero estoy aquí para informar que estamos progresando", señaló el vicepresidente, que aterrizó en el Aeropuerto Internacional de Orlando poco después de las 17.00 hora local (21.00 GMT).
Su visita a Orlando la inició precisamente en la terminal A del aeropuerto, donde días atrás se levantó un centro de asistencia para los desplazados a Florida desde Puerto Rico como consecuencia de los efectos del huracán, y que es coordinado por agencias estatales y federales, como la Agencia Federal de Manejo de Emergencias (FEMA, por su sigla en inglés), además de organizaciones caritativas.
En este centro de asistencia, Pence sostuvo breves encuentros con puertorriqueños que han llegado a Florida en las últimas horas, entre ellos una mujer llamada Everlinda Burgos, quien, de acuerdo al pool de periodistas que lo acompaña, urgió al vicepresidente a que en su visita recorra partes del centro de la isla que se han visto especialmente afectadas por el huracán María.
"Vamos a trabajar con cada área de Puerto Rico", le respondió el vicepresidente, que poco después sostuvo en el mismo sitio una reunión informativa con representantes de FEMA.
Poco después de concluir su discurso y abandonar el estrado de la iglesia, el vicepresidente no dudó en arremangarse la camisa y ayudar a cargar cajas de botellas de agua y de comida a un camión.
El huracán María ocasionó la muerte a, por lo menos, 34 personas a su paso por Puerto Rico.