Aeropuerto de Tocumen recibe el 8% de las pruebas que se realizan para detectar la COVID-19
Las medidas para frenar la propagación de la COVID-19 no se detienen, ahora los viajeros que ingresen por el Aeropuerto de Tocumen que no portan pruebas PCR, deberán someterse a una prueba molecular que permite al sistema de salud detectar de forma rápida a los positivos y aislarlos.
Rolando Bissot, coordinador médico de Jers Medical, explicó que ayer se instaló una serie de maquinarias adicionales a las que ya se tenían de pruebas de antígeno para realizar pruebas moleculares a los viajeros que llegan de Suramérica.
“Las pruebas moleculares son aquellas que son más sensibles y específicas para el diagnóstico preciso de esta patología y existen diferentes test con sensibilidad mayor del 98% y especificidad mayor del 99.5%”, dijo Bissot, aclarando que las pruebas que se hacen en el aeropuerto no son PCR, sino moleculares.
Jers Medical tiene cerca de siete años de operación en Panamá, realizando actividades médicas relacionadas con el suministro de insumos a hospitales y laboratorios. Actualmente está tramitando maquinarias de pruebas rápidas para detectar diferentes patologías, hasta embarazos, que están siendo utilizadas en todos los hospitales públicos y privados del país, indicó Bissot.
Detalló que para las pruebas que detectan la COVID-19, se ha conformado un consorcio por tres laboratorios: Human Lab, BMA Laboratorio y Laboratorio San Miguel Arcángel, que llevan varios años operando en Panamá, ya que Jers Medical no podía ingresar en la concesión porque no es laboratorio, sino una empresa que se dedica a vender insumos médicos quirúrgicos para laboratorios y hospitales.
Bissot aseguró que los laboratorios que conforman el consorcio cuentan con la certificación del Instituto Conmemorativo Gorgas para realizar estas pruebas. Además, explicó que en el Aeropuerto Internacional de Tocumen, tienen 144 empleados entre médicos, tecnólogos, asistentes de tecnólogos, hisopadores, azafatas, cajeras, orientadores y los de comunicación que envían los resultados al Ministerio de Salud. También, al aeropuerto se le paga 8% de cada cosa que se haga en él.
Aclaró que la empresa que representa no fue la única en presentarse al acto de licitación, que hubo otra más pero no contaba con los requisitos del procedimiento y no pudo participar.
El doctor resaltó que la operación que realizaron para armar el procedimiento en tres días no fue fácil, pues tuvieron que buscar pruebas en laboratorios que les compran a ellos, pagar a Estados Unidos máquinas y pruebas nuevas, comprar insumos, y conseguir 144 trabajadores de la salud. De igual forma, para las pruebas moleculares se tuvo que hacer otra inversión en máquinas y se cuenta con 18 en el aeropuerto que están funcionando desde ayer.
Bissot destacó que los resultados de las pruebas salen en 45 minutos, tienen un 98% de sensibilidad y las máquinas tienen una capacidad menor de 96 pruebas por sesión.