El cumplimiento de las medidas de bioseguridad será clave en el retorno a las escuelas
Clases presenciales
Falta menos de un mes para que los estudiantes a nivel nacional retornen a clases de manera presencial, luego de dos años irregulares a causa de la pandemia de la COVID-19. Para muchos esto será un gran reto, tomando en consideración la baja tasa de niños vacunados, por lo que se espera analizar el comportamiento del virus en esta nueva etapa.
No obstante, las escuelas reabren con una serie de medidas de bioseguridad que deben cumplir los niños para evitar el contagio de la enfermedad como el uso de mascarillas en todo momento, lavado de manos frecuentemente y el distanciamiento físico que se pueda establecer.
La directora nacional de Educación Ambiental, Carmen Aparicio, manifestó que todas las escuelas cuentan con un comité covid que ha establecido los protocolos, reconociendo que en algunas son más estrictos que otras, pero esto lo hacen basado en la experiencia que tuvieron el año pasado con la semipresencialidad.
Recalcó que lo más importante será el uso de mascarilla, lavado de mano, desinfección de los espacios que utiliza como norma de auto higiene, además, aclaró que el uso de caretas como medida extra es una decisión de cada plantel.
Recomendó a los docentes estar pendientes de cuáles son los contactos o compañeros con los que más se relacionan los niños, para que dado el caso que un menor presente síntomas se pueda hacer la trazabilidad de inmediato.
Aparicio indicó que si un estudiante llegase a tener alguna dificultad para asistir a la escuela y se pueda conectar de forma virtual lo haga; pero el docente tiene la obligación de garantizar la educación a través de módulos u otras herramientas.
Sobre los buses colegiales, indicó que aún se están negociando algunos detalles sobre las medidas que se van a adoptar.
Mientras que, los recreos serán escalonados para que los de menor grado pueda salir antes que los de altos grados, además, para que no haya aglomeraciones en las tiendas y se pueda mantener el distanciamiento.
Los niños no podrán compartir sus meriendas como anteriormente lo hacían antes de pandemia.