Defensoría del Pueblo reacciona a nueva denuncia de supuestos abusos a menores en secta religiosa

Eduardo Leblanc, defensor del Pueblo.
Eduardo Leblanc, defensor del Pueblo. / Cortesía

Luego de las nuevas denuncias de supuesto abuso a menores a manos de un grupo religioso en el distrito de Kankintú en la comarca Ngäbe Buglé, la Defensoría del Pueblo expresó su preocupación por las víctimas de supuesto maltrato físico, emocional, salud, alimentación y privación de su libertad.

En un comunicado la institución señala que los niños, niñas y adolescentes requiere con urgencia que se les garantice el respeto y seguridad integral, desde el cuidado que deben tener por parte de sus familiares, hasta la aplicación de las leyes nacionales e internacionales que son de obligatorio cumplimiento por parte del Estado panameño.

"La Defensoría del Pueblo reitera que la actual pandemia no puede ser excusa para desatender las situaciones que afronta esta población y exige a las autoridades asegurar la protección, atención física, emocional, psicológica, educación y demás derechos que podrían haberse visto violentados", indica el documento.

Además, la institución pide con carácter de prioridad se realicen las investigaciones pertinentes a toda situación que ponga en riesgo la vida humana de esta población a fin de deslindar responsabilidades de acuerdo al debido proceso y las normativas vigentes.

Como Institución Nacional de Derechos Humanos, exhortamos a las entidades públicas, sociedad civil y particulares a coadyuvar con la protección de los niños, niñas y adolescentes; redoblar esfuerzos por el bienestar integral, en especial a los que presentan mayores condiciones de vulnerabilidad.

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