Embajador de EEUU en Panamá afirma que memorando es 'legal' y advierte que las visas 'son un privilegio'

En cuanto al ambiente empresarial, Cabrera afirmó que está comprometido en ampliar oportunidades para empresas estadounidenses en Panamá.

Kevin Marino Cabrera / TVN

Panamá/El embajador de Estados Unidos en Panamá, Kevin Marino Cabrera, aseguró este miércoles que el memorando de entendimiento firmado entre ambos países es totalmente 'legal', al tiempo que enfatizó que las visas estadounidenses son un privilegio y no un derecho, en declaraciones ofrecidas durante una conferencia de prensa.

Me gustaría aclarar que todos los memorandos que sean firmados entre Estados Unidos y Panamá son legales, sostuvo el diplomático, quien fue enfático también sobre la política migratoria de su país: “Aunque entiendo que los panameños en general son usuarios muy responsables de sus visas estadounidenses, quiero destacar que una visa es un privilegio, no un derecho. Estados Unidos sigue abierto a todos los viajeros legales”.

Cabrera —quien recién ha iniciado su gestión diplomática— señaló que ha tenido “unos maravillosos primeros días en Panamá”, que le recordaron a Miami, y manifestó su compromiso con fortalecer la relación bilateral.

Estoy para promover los intereses de Estados Unidos y para fortalecer nuestra relación con el pueblo de Panamá”.

Durante la rueda de prensa, el embajador reiteró que su misión responde a las prioridades del presidente estadounidense Donald Trump. “La prioridad del presidente Trump es garantizar la seguridad y la prosperidad del pueblo estadounidense, y eso se logra reforzando nuestros lazos con aliados como Panamá”.

También afirmó que ha sostenido varios encuentros con el mandatario panameño. He conversado varias veces con el presidente [José Raúl ] Mulino y con miembros de su gabinete. Estoy seguro de que lograremos muchas cosas grandes juntos”, dijo, dejando entrever que hay alineación entre ambos gobiernos.

Entre los puntos clave de su agenda, Cabrera mencionó el interés en reforzar los trabajos conjuntos contra influencias malignas en la región, particularmente de China. “Esto incluye proteger el Canal de las influencias que afectan nuestros intereses mutuos”, dijo.

China no es un buen aliado de Panamá ni de nuestro hemisferio. Lo hemos visto en la auditoría de la concesión china de los puertos, que ha demostrado que se deben millones de dólares al pueblo de Panamá. También ha quedado claro en la manera en que China está intentando interferir con la venta legítima de la empresa que maneja los puertos. "Reforzaré aún más nuestra cooperación en seguridad para mantener nuestras fronteras seguras y a nuestra gente a salvo del crimen organizado", declaró.

En ese contexto, valoró decisiones recientes del gobierno panameño como el abandono de la Ruta de la Seda, la auditoría a Panamá Ports, y el refuerzo de la cooperación en ciberseguridad:

Celebramos el liderazgo de Panamá en importantes decisiones, como el abandono de la ruta de la seda, la auditoría del Panamá Ports y el reforzamiento de nuestra cooperación en ciberseguridad”, indicó.

Sobre la seguridad del Canal y las acciones a seguir, indicó que mucho ya se ha hecho, y destacó el acuerdo como parte de esa estrategia. “En temas de cómo yo voy a enfocar la seguridad, en parte se ha firmado el memorando de entendimiento y, para dejarlo claro, ayer se estableció lo que hay y lo que no hay del entendimiento”.

Aclaró, además, que las versiones del documento son consistentes. “Lo que rige el memorando de entendimiento es el memorando de entendimiento y no un comunicado de prensa. Yo he visto la versión en inglés y español, son idénticas (…)”.

En cuanto al ambiente empresarial, Cabrera afirmó que está comprometido en ampliar oportunidades para empresas estadounidenses en Panamá:

He tenido reuniones con representantes de empresas estadounidenses aquí en Panamá y voy a abogar por un entorno empresarial justo y transparente”.

Además, expresó su deseo de conectar con la sociedad panameña durante su estadía. “En el tiempo que estaré en Panamá, espero conocer profundamente al pueblo panameño (…)”.

Cabrera, de 34 años de edad, arribó a Panamá la tarde del 28 de abril tras ser juramentado como embajador de Estados Unidos en Panamá por parte del secretario de Estado estadounidense, Marco Rubio, el miércoles 16 de abril.

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