Empresarios esperan apertura de otras actividades en función al aumento de capacidad del sistema de salud

Con el fortalecimiento del sistema de salud, a través del uso de centros de convenciones para atender los casos de COVID-19, el sector empresarial espera que se permita abrir algunas actividades del bloque 3, para reactivar la economía y enfrentar la crisis sin precedentes por la que pasa el país.

Ayer, en las provincias de Coclé, Herrera y Los Santos abrieron algunas de las actividades del bloque 3.

Jean Pierre Leignadier, presidente de la Cámara de Comercio, Industrias y Agricultura de Panamá (Cciap), dijo que la crisis de salud preocupa a la población, sin embargo, considera que la cifra de 20% de desempleados que se estimaba para finales de diciembre, lo más seguro es que se adelante a los próximos dos o tres meses.

Para el presidente de la Cciap, las regiones de Coclé, Herrera y Los Santos, más allá del agro representan un pequeño porcentaje de la actividad económica en general, sin embargo, es una noticia positiva.

“Lo que esperamos es que con la apertura la próxima semana, de la incorporación de camas en el Centro de Convenciones Figali y una mejora del índice del RT se dé más apertura para reactivar la economía”, sostuvo.

En este sentido, reiteró que hay que estar consciente de que surjan nuevos casos, por lo que las personas deben seguir las medidas de uso de mascarilla, lavado de manos y distanciamiento físico.

Leignadier indicó que desde el inicio de la pandemia el sector empresarial ha contribuido con apoyo en programas, entrega de equipos y ayudas a personas afectadas.

Agrega que en las últimas semanas han intercambiado experiencias con otros países de la región, por lo que Panamá se quedó un poco rezagado en cuanto al trabajo preventivo en áreas comunitarias, de allí que varios grupos se han unido para respaldar algunas iniciativas que buscan reducir la cantidad de personas que llegan a los hospitales con COVID-19, ayuda que se concentrará en las comunidades más densas.

Insiste en que se ha planteado la apertura de más de 8 actividades en función de su bajo riesgo de aglomeración, pero a medida que pasan los meses y con tantos contratos suspendidos hay una migración de la economía formal a la informal, en esta última, dice que hay menos control de las medidas de bioseguridad.

Además, se ha planteado la apertura de las mismas actividades que se retomaron en Coclé, Herrera y Los Santos para ponerlas a funcionar en las áreas de Panamá y Panamá Oeste, en función de que se dé el aumento de la capacidad del sistema de salud y se reduzca el índice de contagio de la COVID-19.