Corazón de Madre
En vivo
En la comarca Ngäbe Buglé, el nombre “República de Israel” no tiene el mismo significado de modernismo que en el resto de Occidente: allá es una escuela, todavía en condiciones de rancho, y con una poderosa paradoja.
La empresa que ganó la licitación para la construcción de siete aulas abandonó el proyecto hace semanas, con los trabajos hechos a la mitad.
Según la Oficina de Planificación de la Comarca Ngäbe Buglé, el proyecto costaba $833 mil y beneficiaría a 500 familias y 117 estudiantes del distrito de Besikó, al este de la comarca. Incluiría un laboratorio, comedor y dormitorio para los docentes.
Los padres de familia del plantel cerraron la vía Panamericana este jueves, reclamando el fin de las obras y molestos por cómo el proyecto ha sido manejado por las autoridades.
Resulta que en 2015, dijeron, el Ministerio de Educación licitó las obras, después que una compañía las abandonase e interviniera la aseguradora. Y la compañía que paralizó el proyecto en ese momento es la misma que se volvió a ganar el contrato y volvió a detener el proyecto ahora.
En 2015 los acudientes del colegio salieron a la calle exigiendo la construcción de aulas de clases para reemplazar los ranchos, y en 2013