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El Instituto de Acueductos y Alcantarillados Nacionales (Idaan) reportó un nuevo incremento en los niveles de turbidez del río La Villa, causado por las constantes lluvias en la cuenca. Mientras tanto, el río Estivaná comienza a estabilizarse, según los más recientes análisis de calidad de agua.
Este fenómeno ha afectado el funcionamiento de varias plantas potabilizadoras en la región de Azuero:
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El Idaan explicó que realiza análisis constantes de calidad del agua para garantizar la salud de la población, y que las operaciones de las plantas se ajustan conforme a los resultados. También se informó que continúan los trabajos de optimización de la red para acelerar la recuperación del suministro.
Paralelamente, se mantienen activos los operativos de abastecimiento por carros cisternas, con prioridad en centros médicos. Además, se dispuso de un camión cisterna de 10,000 galones de agua potable en Plaza Praga de Las Tablas para abastecer a las comunidades.
En Llano de Piedra de Macaracas, las personas piden que se les envíe agua potable, tanto embotellada como por medio de carros cisternas, para poder suplir sus necesidades básicas.
Desde el pasado 30 de mayo, la región de Azuero enfrenta una verdadera crisis con el suministro de agua potable debido a la alta turbiedad en el río La Villa y la presunta contaminación del río Estibaná producto de las actividades agropecuarias que se desarrollan en la zona.
Por esta situación, la Fiscalía de Ambiente inició investigaciones para determinar las causas de la contaminación y aplicar las sanciones correspondientes.
En tanto, el Idaan, exhorta a la población a mantenerse informada a través de sus redes sociales oficiales y recuerda que pueden reportar incidencias al teléfono 311.