Rommel Fernández Gutiérrez, una figura vigente a 19 años de su muerte
Un día como hoy, hace 19 años, una luz que iluminaba el firmamento del mundo del fútbol se apagó repentinamente. Un accidente automovilístico acabó con la vida de un hombre que, con su talento, se había ganado el respeto y la admiración de los fanáticos del fútbol, especialmente en España, donde aún hoy es recordado como una gran figura. Fue el 6 de mayo de 1993 cuando el panameño Rommel Fernández Gutiérrez falleció en un accidente de tránsito mientras conducía su automóvil en la carretera de Tinajeros en Albacete, España. Ese día perdió la vida uno de los más grandes jugadores de fútbol que ha dado Panamá en toda su historia. Al mnomento de su muerte, Fernández tenía 27 años, y detrás de él había dejado un legado marcado de muchos goles, grandes alegrías y logros que, posteriormente, sirvieron para abrir las puertas de otros futbolistas panameños que, en la actualidad, juegan en diferentes clubes alrededor del mundo. Su capacidad para anotar goles, especialmente con remates de cabeza, ayudaron a que este hijo ilustre del barrio de Plaza Amador, en el corregimiento de El Chorrillo, llevara al Tenerife a la primera división del fútbol español. Esa misma categoría en la que brillan tradicionalmente grandes clubes del orbe como el Real Madrid y el Barcelona. Por si fuera poco fue el primer futbolista que gana el premio EFE al Mejor Jugador Iberoamericano. Un total de 23 goles en dos años fueron determinantes para que este goleador istmeño llevara al equipo "chicharrero" al nivel más alto del fútbol español. "El Panzer", apodo con el que era conocido Fernández en el fútbol español, poseía una gran estatura (1.85 metros) y una gran fortaleza corporal, lo que supo aprovechar bien para destacar en Panamá con el Atlético Panamá y el Alianza FC, y en España, con el Tenerife, el Valencia y el Albacete. Su amor por Panamá también era manifiesto, prueba de ello es que defendió con orgullo la camiseta de la selección panameña en las eliminatorias rumbo a la Copa del Mundo Estados Unidos 1994. Es difícil olvidar el momento cuando, recién llegado a la tierra que lo vio nacer, se dirigió directamente del Aeropuerto Internacional de Tocumen al estadio Revolución (que hoy lleva su nombre) para ponerse el uniforme nacional y jugar un partido eliminatorio frente a Costa Rica. Luego de 19 años de su muerte, Rommel Fernández aún está en la memoria de aquellos fanáticos que se deleitaron con sus jugadas. En Tenerife, Valencia y Albacete es objeto de homenajes y en Panamá, las personas que le conocieron y estuvieron cerca de él visitan su tumba en el Cementerio Amador. Un día como hoy, en 1993, Panamá perdió a uno de sus deportistas más destacados, pero ganó un atleta legendario que debemos recordar para que su legado no se pierda con el paso del tiempo.