Selección de Panamá: Aduanas y FPF unen esfuerzos para combatir la piratería

Panamá/Con el objetivo de frenar la circulación de productos falsificados, la Federación Panameña de Fútbol (FPF) y la Autoridad Nacional de Aduanas sostuvieron una reunión estratégica destinada a definir medidas que impidan la distribución y comercialización de camisetas no autorizadas con el emblema de la selección de Panamá.

La jornada fue liderada por Carmen Tapia, subdirectora técnica de Aduanas, y contó con la presencia de representantes legales de la firma que posee los derechos exclusivos de fabricación y venta del uniforme oficial, así como de funcionarios de Fepafut. En la sesión se ofrecieron lineamientos para reconocer productos originales y se discutieron métodos para resguardar la propiedad intelectual y comercial vinculada a los artículos deportivos.

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Uno de los acuerdos principales fue la implementación de jornadas de capacitación dirigidas a agentes aduaneros y a otras entidades responsables de combatir el comercio ilegal. Estas actividades educativas permitirán reforzar los mecanismos de control y detección de mercancía falsa, así como contribuir a la lucha contra estructuras delictivas que se benefician de la piratería.

Con información de la Autoridad Nacional de Aduanas.

Piratería de camisetas: un daño al deporte y al país

La piratería de productos oficiales, como camisetas, gorras y accesorios deportivos, representa una seria amenaza para el desarrollo sostenible del deporte. Más allá de ser una simple infracción comercial, la venta de artículos falsificados afecta directamente a los clubes, federaciones y marcas que invierten tiempo, dinero y esfuerzo en impulsar disciplinas deportivas y apoyar a sus atletas.

Cuando un aficionado compra una prenda falsificada, deja de contribuir al financiamiento legítimo del equipo que apoya. Las ventas de productos oficiales generan recursos que se destinan a programas de formación, desarrollo juvenil, infraestructura y pagos a los deportistas. Al adquirir mercancía pirata, se corta ese ciclo virtuoso y se alimenta un mercado ilícito que evade impuestos, fomenta el contrabando y, en muchos casos, financia redes criminales.

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Además, los productos piratas suelen ser de baja calidad, lo que afecta la experiencia del consumidor y daña la imagen del deporte. Camisetas que se desteñen, materiales que causan alergias y logotipos mal impresos no representan con dignidad los colores de una selección o club.

La lucha contra la piratería es una defensa a la integridad del deporte. Comprar productos oficiales no solo es un acto de legalidad, también es un compromiso con el crecimiento del fútbol, el béisbol, el boxeo y todas las disciplinas que nos llenan de orgullo. El deporte merece respeto, y ese respeto también se demuestra eligiendo lo original.

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